No hay plan B
NO queda otra y hay que hacerlo, pero no funciona. El Athletic, serio, eso si, volvió a hincar la rodilla en El Madrigal. Los cambios y el arbitraje marcaron el devenir de un partido en el que los de Valverde estuvieron cómodos 42 minutos. Clos Gómez es un mal árbitro, el domingo lo volvió a demostrar. No tiene criterio, no se coloca bien y casi siempre decide mal. Si a esto le unimos que el equipo rojiblanco adoleció sobremanera de fútbol, poco mas hay que hablar.
El Athletic hoy en día es sota, caballo y rey; no more que dicen los anglosajones. La mayoría de los equipos tienen jugadores que son determinantes, pues en el Athletic también. El once no era muy distinto: había sobre el césped muchos habituales pero en el centro del campo y la punta faltaban cuatro que son vitales a día de hoy. Es cierto que cambiar ante el carrusel de partidos es obligado, pero el equipo se resiente.
Sin Aduriz no hay faro. Beñat es el centrocampista que más en forma está, Susaeta es una referencia y Raúl García da al equipo cosas que otros no pueden. Si además le unimos el gafe de ese campo y la inestimable colaboración de Clos Gómez, no hay duda: tres-uno y a casa.
El Villareal superó por las bandas y en el centro del campo al Athletic. Tras el descanso la entrada de Adrián complicó la existencia a los centrales de Valverde que acabaron desquiciados con el árbitro y con la situación. La segunda parte puso en evidencia las limitaciones del Athletic con ese centro del campo y anticipó a Valverde qué es lo que funciona y lo que no.
Con el Madrid no habrá plan B y eso, seguro, lo agradece el aficionado. Me voy a posicionar del lado de Valverde en tanto en cuanto es obligado rotar. Lo que sí tengo claro es que el sistema, depende con qué equipos, no funciona. Tendrá que hilar fino Ernesto con quién jugársela y con quién no. Y, sobre todo, hay algo en lo que coincido plenamente con el técnico rojiblanco: si ganas, rotar es maravilloso; si pierdes, error.
Mañana volveremos a vivir un partido de la máxima en San Mamés. Día de gala para un partido considerado por muchos como el más importante de la temporada por la historia de unos y otros. Espectáculo garantizado que contaremos como se merece en la radio que cuenta: Onda Vasca.