El exministro de Exteriores Josep Borrell resumió sin quererlo lo que ha sido en un tiempo récord de cuatro semanas, la cumbre del clima, la COP25, en Madrid. Lo hizo mirando la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera: “Tienes cara de muy cansada”. El acuerdo de París de 2015 fue muy importante, pero de nada servirá si no se cumple a rajatabla y se alcanzan nuevos compromisos en la reunión de Madrid. La actitud negacionista de Donald Trump o Jair Bolsonaro y algunas reticencias de Vladímir Putin y Xi Jinping a implicarse más en las medidas contra la crisis climática, dejan a la UE en una posición de liderazgo que seguramente se ratificará estos días en Madrid. El mundo anda despistado, o las apariciones de nuevos dirigentes populistas que como evidencian las olas de protesta social se producen en distintas partes del globo; la irrupción de un nuevo mundo tecnológico con el 5G que va a transformar aún más la vida y hábitos de la humanidad nos invita a hacernos fuertes y atrincherarnos ante tanta incerteza en un único tema crucial y básico: salvar el planeta.