Cuestión de calificativos

Resulta curioso observar las calificaciones que los medios de comunicación otorgan a las distintas formas de pensar. En relación con la noticia de que el Partido Popular aprobó la reforma de nuevo de la Ley del Aborto es razonable que, ante ello, cada uno pueda tener su propia opinión. Pero lo que resulta lamentable es la utilización continua de unos determinados calificativos, con una carga peyorativa indudable, para quienes nos sentimos y militamos en favor de la vida. Me explico. En este tema del aborto cada partido político y cada persona tiene su propia opinión, siendo todas ellas respetables, por supuesto. Pero resulta ciertamente denunciable que la postura de quienes se hallan en contra de la actual regulación y proponen una reforma en la que no se considere al aborto como un derecho de la mujer sean considerados como ultraconservadores, lo cual viene a indicar que se trata de personas absolutamente carcas, reaccionarias y hasta reprimidas. Sería mucho más lógico, y justo, que se nos defina como grupos provida o contrarios a la legislación actual, sin más. Sin ninguna connotación de ningún otro tipo.