CON lo bien que estaría yo ahora mismo tomándome una cervecita en una terraza (o en un chiringuito playero, que también vale)!". Desde la llegada de la canícula y de la época de vacaciones ésta es una de las frases más repetidas en cualquier centro de trabajo. Y ojo, la querencia por la dama rubia no es solamente una cuestión de placer, de regocijo del paladar, sino que alcanza incluso factores beneficiosos para la salud. Pocos productos habrán sido sometidos a más estudios científicos y, según los resultados obtenidos, se puede establecer que su consumo, con moderación por supuesto, ayuda a conseguir un envejecimiento más saludable, mejora el sistema inmunológico, disminuye el estrés, retrasa la menopausia, evita la deshidratación y no engorda. Quizás por ello, tanto por la querencia del público como por sus cualidades beneficiosas, la aerolínea japonesa ANA (All Nippon Airways) ha anunciado esta misma semana que se encuentra ya en disposición de tirar cañas en sus vuelos, algo que hasta ahora era del todo imposible. Hasta el momento estaba prohibido tener el CO2 a la presión necesaria para servir esta bebida con tirador tal y como mandan los cánones, pero esta compañía ha encontrado una novedosa fórmula para despachar la cerveza gracias al CO2 generado mediante nieve carbónica. Ahí es nada. Ya existe un lugar menos en el que la gente añorará tener entre sus manos una cervecita que echarse a la boca. Ah; para los interesados, esta compañía aérea no opera todavía en Europa. Lástima.