El presidente surcoreano, Yoon Suk Yeol, ha pedido este domingo "contención" a sus simpatizantes, después de que un grupo de manifestantes haya irrumpido en el tribunal que aprobó prolongar su detención, un incidente que se saldó con 45 detenidos.

El dirigente se encuentra en el Centro de Detención de Seúl, en Uiwang, horas después de que un grupo de manifestantes se colara por la fuerza de madrugada en el Tribunal del Distrito Oeste de Seúl, trepando muros y rompiendo ventanas, a raíz de la decisión judicial.

Los susodichos arrojaron sillas, basura y otros objetos contra y en las instalaciones, y rociaron con extintores a los agentes apostados alrededor del edificio, produciéndose además algunos altercados físicos, informó la agencia local de noticias Yonhap de Corea del Sur.

Detención policial

La Policía ha detenido a 86 personas desde el sábado, 45 de ellos por su supuesta implicación en los disturbios en el tribunal, y que forman parte de los más de 44.000 simpatizantes que llegaron a congregarse en el exterior de la corte mientras Yoon asistía a la vista sobre la prolongación de su detención, que fue aprobada.

El Tribunal del Distrito Oeste de Seúl ordenó que Yoon permanezca en prisión preventiva mientras continúa siendo investigado por insurrección a raíz de su imposición de la ley marcial el pasado 3 de diciembre, alegando riesgo de destrucción de pruebas.

Tras la prolongación del arresto, los investigadores pueden mantener retenido al mandatario hasta 20 días, que incluyen los que ya ha pasado en el centro al que fue enviado tras su aprehensión.

El arresto de Yoon

El presidente surcoreano fue arrestado el pasado miércoles por la Oficina para los Casos de Corrupción de Altos Funcionarios (CIO) tras un largo asedio a su residencia, donde se encontraba atrincherado desde que fuera destituido el pasado 14 de diciembre.

La CIO es el ente que lidera una investigación conjunta con la Policía y el Ministerio de Defensa sobre si su declaración de la ley marcial pudo equivaler a un intento de insurrección, el único delito ante el que un presidente surcoreano no tiene inmunidad.

La oficina anticorrupción ha pedido al mandatario que se presente a la cita de este próximo lunes a las 10:00 hora local (1:00 GMT).