La Unión Europea (UE) llegó ayer a un acuerdo político para imponer una nueva ronda de sanciones contra Rusia, la decimotercera desde que invadió Ucrania el 24 de febrero de 2022, que será aprobada formalmente en el segundo aniversario de ese conflicto y que incluye el mayor grupo de sancionados en una sola tanda y también a empresas chinas. La presidencia belga de turno del Consejo de la UE informó a través de la red social X de que este paquete de sanciones pactado por los embajadores de los Veintisiete “es uno de los más amplios aprobados por la UE” e incluye medidas individuales y sectoriales.

En total, 194 nombres pasarán a engrosar la lista de sancionados, indicaron fuentes diplomáticas, de manera que contará con más de 2.000 integrantes. Se trata del mayor número de designaciones realizado hasta el momento en la misma ronda de sanciones. Son principalmente personas relacionadas con el entramado militar ruso, jueces, autoridades de zonas ocupadas –en especial vinculadas a la deportación de niños–, y empresas que han participado en el suministro de armas.

Las medidas restrictivas consisten en congelar bienes que puedan tener en la UE y prohibirles su acceso al territorio comunitario. Las sanciones sectoriales se centran en la lucha contra la elusión de las sanciones.

Nuevas entidades

Se ha decidido añadir 27 nuevas entidades a la regulación por la que se prohíbe exportar bienes de doble uso (civil y militar). Hasta 17 son de Rusia y, diez, de otros países: cuatro de China, una de Turquía, una de Tailandia, una de Kazajstán, una de Serbia, una de Sri Lanka y una de la India.

Son sobre todo firmas que participan en redes de adquisición de componentes de vehículos aéreos no tripulados o drones que acaban en el complejo militar ruso y, posteriormente, en el campo de batalla de Ucrania. “Con este paquete, tomamos más medidas contra las entidades implicadas en la elusión y los sectores militar y de defensa”, afirmó en X el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y de Seguridad, Josep Borrell.

Por su parte, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, dijo en la misma red social que “debemos seguir degradando la maquinaria bélica de Putin”.

“Rusia está pagando por sus acciones. El decimotercer paquete de sanciones de la UE acordado hoy desmoronará aún más la producción de arsenales del Kremlin y fragmentará sus arcas para la guerra”, aseguró en X la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola.

Postura de Hungría

Hungría, que cuestiona la utilidad de imponer sanciones, vetó hasta ahora la aprobación del nuevo paquete, sobre el que los otros 26 Estados miembros ya habían llegado a un consenso la semana pasada, apuntaron otras fuentes diplomáticas.

En los últimos días hubo señales de que Budapest no se opondría a la nueva ronda de medidas restrictivas y finalmente fue acordado ayer por los embajadores de los Veintisiete rápidamente y sin debate, aunque con una declaración de Hungría.

Por otra parte, los embajadores europeos acordaron también ayer renovar otros seis meses el actual régimen de sanciones contra Rusia. Y mantuvieron un extenso debate sobre la reforma del Fondo Europeo de Apoyo a la Paz (FEAP), instrumento a través del cual los Estados miembros de la UE están obteniendo reembolsos por las armas y munición que envían a Ucrania.

Países como Alemania quieren privilegiar la cooperación bilateral con Kiev en vez de hacer contribuciones millonarias al fondo, que no se nutre del presupuesto comunitario sino de aportaciones de los Estados miembros.