Irán calificó ayer de “destructivo” el informe del OIEA de que sigue enriqueciendo uranio hasta un nivel cercano al necesario para fabricar armas atómicas y aseguró que no compartirá información para aclarar las trazas fisibles halladas en tres instalaciones no declaradas como nucleares hasta la firma del acuerdo con Occidente.

Teherán respondió así al informe del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) en el que afirmaba que sus reservas de uranio enriquecido ascienden a 3.491,8 kilos, frente a los 300 kilos permitidos por el acuerdo nuclear firmado por Irán con seis grandes potencias en 2015 y que Estados Unidos abandonó tres años después.

“La República Islámica de Irán considera este enfoque destructivo para la cercana relación y la cooperación entre Irán y el OIEA”, dijo el representante iraní ante la agencia atómica de la ONU, Mohamed Reza Ghaebi.

“El OIEA debe darse cuenta de las ruinosas consecuencias que tiene la publicación de un informe unilateral de este tipo”, indicó Ghaebi.

En un informe reservado, los inspectores internacionales precisaron que el uranio enriquecido al 60% alcanzaba el 15 de mayo pasado los 43,1 kilos, un 23,7% más que a comienzos de marzo, cuando se difundió el anterior reporte trimestral.

Producción de uranio

Irán justifica la producción de uranio enriquecido hasta un 60% como material dedicado a fines médicos. Además, las reservas de uranio enriquecido, en diferentes purezas ascendían a mediados de mayo a 3.491,8 kilos, frente a los 300 kilos permitidos con una pureza máxima del 3,67%.

En el caso del uranio enriquecido al 20% la subida registrada en las últimas semanas fue la más notable, al pasar de 182,1 kilos a 238,4 kilos, un 31% más que a comienzos de marzo.

El representante iraní ante la OIEA no entró a valorar las conclusiones del informe de la ONU, es decir la alta producción de uranio, y solo criticó la aptitud del organismo de la ONU.

“El informe no refleja la amplia cooperación de Irán con el OIEA”, aseguró. Por su parte, el portavoz del Ministerio de Exteriores iraní, Said Jatibzade calificó el informe de “injusto” y señaló a una supuesta presión de Israel como la causa del mismo.

“Tememos que la presión del régimen sionista ha afectado al OIEA, que ha pasado de una posición técnica a una política”, dijo Jatibzade.

Salvaguardas

Irán además aseguró que no compartirá información para aclarar las trazas fisibles halladas en tres instalaciones no declaradas como nucleares hasta la firma del acuerdo atómico, tal y como había acordado.

“La agencia (OIEA) no tendrá acceso a la información de sus cámaras u otro tipo de información hasta que se alcance un acuerdo para restaurar el JCPOA”, dijo Ghaebi.

Esas afirmaciones llegan después de que ayer el OIEA indicase en otro informe que sus inspectores no han recibido informaciones “técnicamente creíbles” de Teherán sobre el origen de partículas de uranio antropogénico (producido por humanos).