Las calificaciones de EuroNcap son como las valoraciones a los servicios de atención al cliente: todo lo que no sea un ‘10’ es mala nota. Cuando el Programa Europeo de Evaluación de Automóviles Nuevos –es lo que significa el acrónimo inglés– no concede el sobresaliente está diciendo de manera implícita que el modelo analizado presenta carencias en materia de seguridad. No es el caso del Cupra Tavascan, el Ford Capri y el MG HS, las tres últimas incorporaciones al selecto y por fortuna nutrido club de las cinco estrellas.

El organismo independiente respaldado por fabricantes de automóviles, gobiernos e instituciones europeas realiza continuas evaluaciones de los modelos que se van incorporando al mercado. La oleada más reciente depara estas tres calificaciones máximas, que contrastan con otras más bajas adjudicadas a nuevos productos (alguno de la misma marca que uno de los destacados), lo que evidencia el rigor y la severidad del estudio.

El escrutinio de EuroNcap va encaminado a verificar la seguridad de los vehículos en el más amplio sentido. Verifica la capacidad de evitar el accidente por medio de la tecnología (ayudas a la conducción), así como la preparación para minimizar las consecuencias de un siniestro inevitable. Es decir, valora tanto la seguridad activa como la pasiva.

Constata la consistencia de cada automóvil sometiéndolo a distintos choques reales (frontales, laterales, oblicuos, vuelco…) en el laboratorio. Analiza también los posibles efectos de una colisión en los pasajeros del vehículo (adultos y menores), en viandantes y en ciclistas; todos ellos suplantados por sufridos maniquís de distintas tallas. EuroNcap plasma esa capacidad de amparo en forma de porcentaje; cuanto más se aproxime al 100%, mayor seguridad.

Los sistemas de asistencia a la seguridad del Tavascan merecen, a juicio de los técnicos auditores, una valoración del 79%. El nuevo SUV eléctrico de Cupra alcanza un 89% en protección de ocupantes adultos, un 86% en la de pasajeros infantiles y un 80% en la de usuarios de la vía vulnerables (peatones). Son calificaciones muy altas.

Ford Capri

El Ford Capri, renacido como cupé SUV eléctrico, obtiene las cinco estrellas calcando las puntuaciones de seguridad personal del Tavascan: 89%, 86% y 80%. Su dotación de medidas protectoras se valora un poco menos (72%).

MG HS

No menos brillantes son los resultados obtenidos por el MG HS. El SUV chino cosecha un 90% de valoración en protección de adultos, un 85% en la de niños y un 83% en la de otros usuarios de la vía. La dotación de sistemas de asistencia en materia de seguridad alcanza, a juicio de EuroNcap, un 74%.

A esta lista de los automóviles pentaestrellados se acaba de sumar también el Omoda 5 EV. La nueva declinación eléctrica ratifica así la máxima puntuación obtenida en 2022 por el SUV del grupo chino Chery.