La versión eTSI de 150 CV del León emplea, por primera vez en la firma Cupra, tecnología de microhibridación, también conocida como hibridación suave o ligera. Asocia al propulsor de combustión un generador, que compagina esa función con la de motor de arranque, y una batería de iones de litio de 48 voltios. El sistema recupera energía liberada en retenciones y frenadas, y la emplea para brindar apoyos puntuales al bloque de gasolina (aceleraciones intensas para adelantar, por ejemplo), contribuyendo así a ahorrar carburante. Esta, como todas las soluciones híbridas ligeras, nunca hace avanzar el vehículo en modo exclusivamente eléctrico. El León eTSI remite su potencia a las ruedas delanteras con ayuda de un cambio automático DSG de siete relaciones, con levas en el volante.