El atleta etíope Selemon Barega se ha colgado el primer oro del atletismo en los Juegos Olímpicos de Tokio tras imponerse este viernes en la prueba de 10.000 metros, donde el español Carlos Mayo ha firmado una meritoria decimotercera posición.

En la primera final olímpica que acogía el Estadio Nacional en estos Juegos, Barega sorprendió a los atletas ugandeses con un demoledor ataque antes de la recta final que le permitió conquistar el oro con un tiempo de 27:43.22.

Pese a que intentaron la remontada hasta el final, no lograron culminarla ni el gran favorito Joshua Cheptegei (27:43.63) ni su compatriota Jacob Kiplimo, que se tuvieron que conformar con la plata y el bronce, respectivamente.

Por su parte, Carlos Mayo fue el decimotercero entre los 25 atletas que tomaron la salida. El madrileño, de 26 años y campeón de España de 5.000 metros, firmó un tiempo de 28:04.71 en su primera participación olímpica.