El Bilbao de 1981 vio nacer a la maestra jabonera y cerista Agurtzane Tejada Alonso. Hace casi 20 años, en 2006, comenzó a elaborar sus propios jabones en casa, porque le encantaban los que veía en las tiendas. Lo mismo le ocurría con los olores, las formas, las propiedades que tenían...

De esta forma, le surgió la curiosidad de experimentar. Después, se fueron uniendo las ganas de saber sobre plantas, aceites esenciales y el resto de elaboraciones como bálsamos, ungüentos... Actualmente, la artesana bilbaina muestra todas sus creaciones en sus redes sociales como @xaboi.es, al igual que en su página web.

Los jabones de Xaboi se realizan con ingredientes naturales. irenehalley / Cedidas

Al principio, le costó mucho aprender a realizar sus jabones, cosmética y velas, pues no sabía a dónde acudir. Mediante foros de internet, fue convirtiéndose en parte de una comunidad de jaboneras a nivel estatal. Tanto así, que acabó viajando a Barcelona y Madrid para formarse. Respecto al tiempo que invierte en llevar a cabo sus productos artesanales, Tejada cuenta que durante el proceso tiene que formular el jabón, elaborarlo y dejarlo madurar meses.

Xaboi nació como marca en el año 2006. Cedida

Variaciones imprevistas

La artesana considera que pese a que conseguir los materiales para llevar a cabo sus creaciones es fácil, muchas veces los precios se ven sometidos a variaciones imprevistas. “Date cuenta de que compro al pormayor y, dependiendo de las cosechas de ese año, los precios pueden cambiar. Por ejemplo, la manteca de cacao o el conocidísimo subidón del aceite de oliva”, explica.

Dificultad de acceso sin redes

Agurtzane Tejada siente que las redes sociales han ayudado a Xaboi a la hora de dar la marca a conocer. Empezó en Facebook y, ahora, sobre todo se mueve en Instagram. Por eso, si tuviera que vivir un día a día sin ellas, podría seguir con su negocio “perfectamente”, pero le sería muy difícil acceder a un nuevo público. “Solo tendría los mercados para ello”, puntualiza. Cree que lo que le gusta a la gente es verla trabajando, ver cómo corta el jabón, cómo mezcla las diferentes esencias...

La creadora bilbaina ha experimentado mucho y con muchos ingredientes, pero lo que más suele sorprenderle a la gente cuando lo explica es el jabón de leche materna (humana) que suele elaborar: “Tiene unas propiedades brutales, es cremoso, nutritivo y va fenomenal para pieles adultas y niños que tengan problemas”.

Tienda

Xaboi es una marca que nació en 2006, fundada por esta maestra jabonera bilbaina, con una visión clara: ofrecer productos de cosmética natural de la más alta calidad y velas respetuosas con el medio ambiente, libres de tóxicos

Aparte de cosmética, Xaboi también lleva a cabo velas. irenehalley / Cedida

Sus jabones artesanales son elaborados uno a uno, utilizando ingredientes naturales como aceites de oliva, coco BIO, karité BIO, argán BIO, macadamia BIO y colorantes minerales provenientes de arcillas y micas. Utilizan la técnica de la saponificación en frío, pues garantiza la preservación de todas las propiedades beneficiosas de las materias primas.

Además, elaboran una amplia gama de bálsamos para el cuidado de la piel y productos de higiene especializados, como champús, acondicionadores y productos para barba y afeitado, creados con técnicas avanzadas de extracción de propiedades de plantas.

Así es el paso a paso que lleva a cabo Tejada

Para la artesana bilbaina Agurtzane Tejada lo más importante de todo es formular la elaboración, ya sea jabón, bálsamo o cualquier preparado cosmético. “Tienes que tener claro para qué quieres que se vaya a utilizar, las propiedades que ha de tener...”, recuerda.

Como segundo paso, cuando ya se han elegido todos los ingredientes en base al producto final que se quiera hacer, hay que pensar la forma, el color... “Muchas veces estoy muy limitada, porque los colorantes naturales como las arcillas o el carbón también tienen propiedades y hay que mirar si le van bien. Entre mis técnicas favoritas para la saponificación en frío se encuentran el marmolado o las inclusiones”, matiza. Una vez decidido todos los ingredientes, “toca hacer magia”.

Se mezclan los ingredientes, se lleva a cabo la técnica decorativa elegida y se deja reposar durante 24 o 48 horas para que la mezcla endurezca. En el caso de los bálsamos, ungüentos y otro tipo de preparaciones cosméticas, solo quedaría el envasado y el etiquetado. En el caso de los jabones, una vez pasados dos días, se desmoldan, se cortan, se viselan y se pulen las piezas. “Hay algunas que las sello con motivos bonitos decorativos. Tras dejarlos preparados, se han de poner a curar mínimo 40 días en el secadero”, destaca. Estos se finalizan también tras el envasado y el etiquetado.