Amorebieta y Tudelano igualaron en sus propósitos y se olvidaron de los goles en un partido en el que se impuso el respeto y el miedo a perder. La visita del colíder, con siete puntos de ventaja sobre los azules, infundió demasiadas reservas a los de Urritxe y los navarros se conformaron y dormirán líderes con el punto cosechado mientras que los zornotzarras se mantienen en la zona media de la tabla.

El comienzo de la primera mitad fue los más animado y entretenido de todo el encuentro. Por la banda izquierda entró Asier Sánchez y despejó Yoel. El Tudelano quería y tuvo el balón en el primer acto. Alayeto probó suerte desde lejos. Zorrilla, en jugada personal, finalizó sin acierto. Altamira neutralizó el disparo raso de Albín, en la mejor ocasión visitante. Zorrilla volvió a colarse en área rival sin poder concretar al final.

AMOREBIETA: Altamira, Mendibe, Odei, Entrecanales, Castañeda, Arratibel, Fausto, Hodei Rodríguez (Min. 63, Rekagorri), Asier Sánchez (Min. 63, Etxaniz), Torrico y Zorrilla (Min. 86, Intxausti).

TUDELANO: Yoel Ramírez, Dufur, Aimar, Iker Bachiller, Parada, Guille Alonso, Bonilla, Albín (Min. 58, Isaac), Alayeto (Min. 92, Kessas), Aparicio (Min. 84, Lorenzo) y Bouguettaya (Min. 84, Clavería).

Árbitro: Carlos Fernández Buergo (Comité Asturiano). Amonestó al local Castañeda y a los visitantes Aparicio y Alonso.

Incidencias: 400 espectadores en Urritxe.

El partido fue bajando el ritmo y se produjeron demasiadas interrupciones. Apenas se jugó con criterio. Parada probó suerte desde lejos y el balón se marchó por encima del larguero. Algo más de mordiente mostró el Tudelano.

En la segunda parte, los azules mejoraron y adelantaron líneas. A balón parado Bouguettaya remató, pero el balón tocó en un defensa local y llegó a córner. La posesión era de los vizcainos, pero no hubo fluidez en el juego como en los primeros instantes y el partido se tornó aburrido. Cualquier error podía decidir el encuentro. No se jugaba en las áreas. Yoel se hizo con el balón en dos tiempos ante Rekagorri en una de las pocas ocasiones de peligro antes de llegar al reparto de puntos sin goles.