El Barcelona tiene una deuda en fichajes cifrada en 159,1 millones de euros. Así lo ha revelado el último informe económico del club, cuyas cifras ha hecho públicas el diario Sport. La entidad presidida por Joan Laporta tiene por otra parte pendientes de cobro 64,1, millones de euros.

La entidad culé debe abonar a corto plazo 140,6 millones de los 159,1 que adeuda, mientras que los 18,5 restantes corresponden a una deuda a largo plazo. El informe detalla concretamente cuáles son los pagos a los que debe hacer frente el Barcelona. El Leeds es el club al que más dinero debe. Se trata de 41,9 millones pendientes de pago por el traspaso de Raphinha (fichado el verano de 2022). En segundo lugar aparece el Sevilla, que aún debe ingresar 24,5 millones por la venta de Jules Koundé (fichado el verano de 2019). En el tercer peldaño figura el Bayern Múnich, que espera 20 millones por Robert Lewandowski (fichado el verano de 2022). Seguido está el Manchester City, que todavía tiene que ingresar 13,3 millones por Ferran Torres (fichado en invierno de 2021) y por último aparece el Betis, al que se le adeudan 8 millones por Emerson Royal. Además, el club catalán tiene que abonar otros 6 millones a clubes alemanes y polacos relacionados con la figura de Lewandowski.

Al parecer los 140,6 millones de euros programados como pagos a corto plazo deberían ser resueltos antes del próximo 30 de junio de 2026. Una cantidad que se podría amortiguar con al regreso al Spotify Camp Nou, que, según se ha anunciado desde el club, podría reportar 100 millones de euros extras en beneficios.

Ingresos pendientes

Por otra parre, el documento que ha hecho público el diario catalán también informa de que los pagos pendientes de recibir por parte del Barcelona suman una cantidad de 64,1 millones, de los cuales 40,3 millones se deben a operaciones con otras entidades deportivas, mientras que 12 proceden de la Liga de Fútbol Profesional. Las cuentas pendientes de cobrarse más destacadas son las siguientes 6,7 por Nico González (Oporto), 4,1 millones por Kessié (Al-Ahli) y 3,1 millones por Marlon (Shakhtar Donetsk).

Laporta deberá someter a votación la aprobación del cierre económico del pasado ejercicio y del presupuesto de la actual temporada el próximo 19 de octubre, cuando el club llevará a cabo una asamblea ordinaria ante sus socios. Cabe recordar al respecto que el Barcelona cerró el pasado ejercicio con dos millones de euros de beneficio, una cantidad cinco millones menor a lo que se anunció en las previsiones, ello a pesar de que el club consiguió tres títulos: la liga, la Copa y la Supercopa de España. Además, alcanzó las semifinales de la Champions League, donde cayó eliminado a manos del Inter.

Más ingresos, pero también más gastos de los previstos

Con todo, la actual Junta Directiva considera que se trata de resultados positivos teniendo en cuenta que el equipo no ha podido jugar en el Camp Nou, lo que representa una merma considerable en la cuenta de ingresos. Es precisamente en el apartado de ingresos donde Laporta y su equipo de trabajo sacan pecho, ya que se lograron 994 millones, 101 más de los previstos. Si bien, por otro lado los gastos también han superado las estimaciones. Se alcanzaron los 965 millones pese a los 873 previstos.

Como apuntan desde el Sport, “desde el club subrayan que todas las partidas de ingresos superaron las expectativas, un hecho que, pese al incremento del gasto, permite mantener la narrativa de una gestión más estable tras los años de crisis y ajustes financieros”. Con esta cifras deberá someterse Laporta a examen ante la masa social del club.