El Amorebieta no despega y sigue su transcurrir al ralentí. El conjunto azul se tuvo que conformar el domingo con sumar un punto en Segovia ante la Gimnástica, escasa cosecha, y, junto a la victoria del Barça Atlètic sobre la Cultural Leonesa, líder del grupo I de Primera RFEF, vuelve a caer en la última plaza, una situación cada vez más asfixiante cuando solo restan ocho partidos para cerrar la liga regular. El colectivo zornotzarra compitió bien ante un rival directo pero no le dio más como para haberse llevado la victoria, tal como reconoció Natxo González, su entrenador. “Cada queda menos, queda menos margen de error y el empate no es bueno para ninguno de los dos. Quedan 24 puntos, que son muchos, pero no podemos esperar mucho más y el partido siguiente es decisivo, como era este. Hay mucha tela por cortar, pero no estamos a dos puntos de la permanencia, estamos a muchos más, no es una situación sencilla pero vamos a pelear por ello”, declaró el gasteiztarra, que se queda con los 60 minutos en los que el Amorebieta, a su entender, fue superior, “pero no lo hemos transformado en goles”.
Lo cierto es que el Amorebieta está obligado a romper sus estadísticas para poder optar a una permanencia que se sitúa a ocho puntos y que marca el Real Unión. Un reto my complicado para un colectivo que no ha sido capaz de ganar partido alguno en sus 15 desplazamientos y en los que solo ha rascado cinco empates, lo que le convierte en el peor equipo como visitante de los 40 que forman los dos grupos de la categoría. Unos números muy pobres y a los que suma la inercia actual de los azules, que encadenan cuatro jornadas sin conocer la victoria y en las tres últimas han repetido resultado, 1-1, por lo que necesitan la victoria como el comer y cuando antes, mejor. Una victoria que los de Natxo González buscará el próximo domingo en Urritxe ante la irregular Real Sociedad B, cuarto clasificado.