Con casi total unanimidad, 153 votos favorables y dos abstenciones, la Asamblea del Sestao River aprobó el acuerdo de colaboración y patrocinio con el grupo Sidenor-Mirai para las próximas dos temporadas y lo que resta de la actual. El acuerdo, calificado por la directiva verdinegra como “histórico”, ya que apoyará financieramente a la entidad “como nunca se ha visto en un club de fútbol en Bizkaia”, conlleva dirigir al River hacia una conversión en Sociedad Anónima Deportiva (SAD) que se llevará a cabo cuando termine este pacto de colaboración, en 2027, y en la que el gigante siderúrgico presidido por José Antonio Jainaga se hará, casi con total probabilidad, con la mayoría de las acciones de la nueva SAD.

Este acuerdo aprobado este jueves por la masa social del River permitirá al club desahogar su precaria economía. El presidente Ángel Castro, al inicio de la Asamblea, planteó con toda crudeza la situación económica de la entidad. Al aval de 200.000 euros que el club debe aportar para poder inscribirse en Primera Federación se suman los 50.000 euros de déficit que arrojaron las cuentas del pasado ejercicio. Un presupuesto mínimo, cuadrado al milímetro verano tras verano para poder llegar al mínimo salarial, actualmemte fijado en 20.000 euros, no podrá ser sacado adelante si la próxima temporada dicho mínimo asciende hasta los 25.000, tal como indicó Castro. Además, el presidente hizo saber que de los 300.000 euros que el Sestao tiene que ingresar en concepto de subvenciones, tan solo ha llegado una tercera parte con siete meses de temporada transcurridos. En cuanto a los ingresos por patrocinios y sporsors, Castro elogió la labor “con pico y pala” del departamento comercial del club, pero estas cantidades “llegan hasta un techo y no dan para más”.

El grupo Sidenor-Mirai y el acuerdo firmado por la directiva y ayer ratificado por la masa social permitirá dejar atrás esta situación que ahoga al club y que “no le permite crecer más, ni en el ámbito deportivo ni en el social”. Nunca se citaron las cantidades concretas del acuerdo en la Asamblea, por el momento “confidenciales” según puntualizó el directivo Iñigo Urizar, pero que aportarán “sustento económico” y “músculo financiero” a la entidad.

La eventual votación sobre la conversión a SAD se realizará al final del período de colaboración, aunque tal y como reconoció la directiva, podrá realizarse “en cualquier momento dentro de estos dos años y medio”. De darse un resultado negativo en dicha votación, Sidenor retiraría su apoyo económico y financiero. Un apoyo que también se vería reducido en el caso de que el River descendiera a Segunda RFEF.