Cádiz 1

Celta 0

CÁDIZ: Ledesma; Carcelén, Hernández, Meré, Espino; Escalante, Alcaraz, Bongonda (Min. 76, Alejo), Sobrino (Min. 86, Momo); Lozano (Min. 62, San Emeterio) y Guardiola (Min. 76, Roger).

CELTA: Villar, Mallo (Min. 61, Mingueza), Aidoo, Nuñez, Galán; Tapia (Min. 86, Seferovic), Óscar (Min. 61, Paciencia), Veiga; Carles Pérez, Miguel (Min. 46, De la Torre y Larsen (Min. 61, Aspas).

Gol: 1-0: Min. 53; Sobrino.

Árbitro: De Burgos Bengoetxea (Comité Vasco). Amonestó con cartulina amarilla a los locales San Emeterio y Lozano y a los visitantes Galán, Nuñez, Óscar y Alejo.

Incidencias: Nuevo Mirandilla, ante unos 20.000 espectadores.

El Cádiz ganó ayer domingo al Celta para dejar casi cerrada la permanencia en LaLiga Santander tras un triunfo muy trabajado que se obtuvo gracias a un gol de Rubén Sobrino en el minuto 53, que mete en serios problemas a los gallegos. En la primera parte, un fútbol sosegado fue la tónica durante los primeros minutos. Ambos equipos querían controlar un juego en el que tomó el mando el Cádiz con un paso adelante. Los locales lo intentaron con un chut de Theo Bongonda de primeras que se fue desviado. Este mismo jugador cayó en el área visitante en pugna con Javi Galán y De Burgos Bengoetxea señaló penalti, que finalmente no fue sancionado al revisar la jugada en el VAR. El sistema de videoarbitraje volvió a intervenir antes del descanso en contra de los intereses del Cádiz al determinar fuera de juego en la acción anterior a un tanto de cabeza de Lozano.

Tras la reanudación, el Cádiz se adelantó en el marcador con un gol de Sobrino, que cruzó el balón lejos del alcance de Villar tras un pase del argentino Gonzalo Escalante. El Celta tomó el mando y con la entrada de varios cambios, entre ellos el goleador Iago Aspas, se encomendó a los balones al área local para intentar empatar. Un cabezazo de Domingos Paciencia lo detuvo Ledesma (minuto 67) en una buena parada en la mejor ocasión de los célticos. Con las líneas juntas, el equipo dirigido por Sergio González mantuvo un riguroso concepto táctico ante el que nada pudo hacer el rival. Los ataques del equipo gallego eran cercenados por la defensa del conjunto gaditano, que vio cómo pasaron los minutos hasta felicitarse por el objetivo logrado de dejar la permanencia bien encarrilada, mientras que el Celta se mete en problemas.