‘Dinamo Traka Tra, Dinamo Traka Tra... En el Dinamo siempre reina la alegría, en el Dinamo siempre reina el buen humor...’. Los cánticos son ensordecedores. La ocasión lo pide. El barrio San Juan, en pleno, ha despedido sobre las 15.30 horas a lo grande a su equipo, el orgullo de un enclave humilde de Santurtzi que ha sido foco de interés de los medios de comunicación en las fechas previas y que lo será aún más en caso de que el conjunto dirigido por Raúl Quintana haga esta noche en la localidad riojana de Autol más historia con su clasificación a la primera eliminatoria de Copa, donde le esperaría un equipo de Primera División, entre ellos el Athletic.
Ha sido un homenaje emotivo, donde los vecinos de San Juan han brindado a sus héroes un pasillo de honor, donde las banderas, las bufandas y las bengalas, todas ellas bien moradas, han dotado de un color especial a una bulliciosa partida que ha tenido continuación en el interior de los seis autobuses que se desplazan hacia Autol, cinco de ellos repletos de más de 300 hinchas (el restante lo ocupan plantilla, directiva, cuerpo técnico y socios de avanzada edad) que han pedido, en su mayoría, dos días de fiesta en sus respectivos trabajos (”Mañana la resaca será de campeonato”, dice Carlos, un fiel seguidor”).
El recorrido se ha convertido en todo un jolgorio al que se sumarán en el campo de La Manzanera antes de las 20.00 horas el resto de aficionados que se han desplazado en vehículos particulares. “Nos vamos a poner morados de Copa, nunca mejor dicho”, avisa una cuadrilla formada por gente joven. La historia espera al Dinamo.
