Barakaldo - No pudo ser. El Barakaldo, a pesar de la gran imagen ofrecida en la primera mitad, cayó derrotado por 1-3 a manos de un eficaz Valencia, que hizo valer su poderosa pegada para salir victorioso de Lasesarre y afrontar con dos goles de ventaja el partido de vuelta que albergará Mestalla. El entrenador aurinegro, David Movilla, lamentó tras el choque la derrota sufrida en un encuentro en el que “hemos tenido hasta ocho ocasiones de gol y el Valencia solo tres o cuatro, pero han sabido aprovechar los espacios y los fallos nuestros en el origen de sus tres goles”.
El técnico, satisfecho con el rendimiento ofrecido por sus pupilos en una cita de máxima exigencia, valoró positivamente que el conjunto ché tuviera que echar mano de Paco Alcácer tras el descanso, señal inequívoca de que “no lo veían nada claro”. El partido, más allá de lo que reflejó el luminoso al término de los noventa minutos, “nos hace ser más fuertes y seguir mejorando, porque jugar contra los mejores te permite progresar. El Barakaldo, como club, también sale reforzado, porque se ha visto a una afición volcada con el equipo, por lo que vamos a luchar para que vuelvan a darse noches como esta”, remarcó el propio Movilla, que hizo hincapié en que dentro de dos semanas “iremos a Mestalla a ganar el partido y a intentar marcar nuestro ritmo, con nuestra forma de jugar, que nos está dando buenos resultados en liga y en Copa, a pesar de este resultado contra el Valencia”.
Sin problemas físicos Al ser cuestionado por el menor ritmo de juego que exhibieron sus jugadores en el tramo final del envite, Movilla negó que tuviera relación directa con un posible desgaste físico. “Hemos acusado el resultado, no el físico. Si hubiéramos ido por delante en el marcador, habríamos ido como aviones, pero nos ha pesado el resultado”, resaltó el entrenador del Barakaldo, decidido a apurar en Mestalla todas las opciones de clasificación del Barakaldo.
