La mejor versión verdinegra
El Sestao retoma la senda del triunfo tras remontar ante la Gimnástica
SESTAO RIVER: Magunazelaia, Apraiz, Igor Cuesta, Eneko, Arnáez, Izurza, Larrazabal, Vilarchao (Min. 90, Unai Calvo), Hernáez, Etxaniz (Min. 78, Oskar Martín) y Arranz (Min. 81, Ibon Gutiérrez).
GIMNÁSTICA: Iván Crespo, Abraham, Alberto, Mario, Dani Cobo (Min. 59, Carlos Álvarez), Negredo, Javi, Nando (Min. 67, Cristian), Nacho Neira, Aarón y Víctor Sánchez (Min. 23, José Luis).
Goles: 0-1: Min. 6; Víctor Sánchez. 1-1: Min. 14; Etxaniz. 2-1: Min. 48; Mario, en propia puerta. 3-1: Min. 70; Arranz.
Árbitro: Adrián Lixandru (Colegio aragonés). Amonestó por los locales a Vilarchao e Igor Cuesta, y por los visitantes a Javi, Nacho Neira, Abraham, Carlos Álvarez y Aarón.
Incidencias: Cerca de un millar de espectadores en Las Llanas.
SESTAO. Victoria merecida para el Sestao River ante la Gimnástica de Torrelavega en un difícil encuentro donde los verdinegros sudaron para remontar el tanto inicial de un conjunto cántabro que acabaría desmoronándose en la segunda mitad. El duelo no pudo comenzar mejor para el conjunto blanquiazul, que se adelantó en su primera jugada de peligro. Víctor Sánchez, que abandonaría el campo lesionado pocos minutos después, puso en ventaja a la Gimnástica tras culminar una rápida contra. Al Sestao, que prácticamente aún no había entrado en calor, le afectó el gol tempranero y entonces se pudieron ver los mejores minutos de los visitantes. Pese a ello, antes del cuarto de hora Etxaniz empató tras aprovechar un buen pase y driblar a Iván Crespo.
A partir de entonces el Sestao se hizo dueño y señor y la Gimnástica poco a poco fue cediendo metros, permitiendo a los verdinegros gozar de ocasiones para ponerse por delante. A la media hora, los locales pidieron penalti en un derribo de Crespo a Etxaniz. Poco después, el central Eneko dispuso de una buena opción con un cabezazo que detuvo el meta cántabro con dificultades. Al borde del descanso, tanto Cuesta como el propio Eneko estuvieron a punto de batir la meta blanquiazul con sendos testarazos pero no hubo suerte y con el 1-1 se llegó al descanso.
Sin embargo, al poco de comenzar la segunda parte el cántaro por fin se rompió y el River consiguió ponerse por delante en una acción desafortunada del defensa Mario, que introdujo en su portería un balón rechazado por Crespo a disparo de Izurza. Todo fue mucho más fácil para el Sestao, que no encontró réplica. A falta de veinte minutos Arranz ejecutó con maestría un libre directo.