El hidrógeno, vector en la transición energética vasca

Fue el pasado 8 de noviembre cuando el Museo Guggenheim acogió la primera asamblea de la Asociación del Corredor Vasco del Hidrógeno. Durante el acto, su presidente, José Ignacio Zudaire, puso de manifiesto el papel esencial que jugará el hidrógeno tanto en Euskadi como en Europa en la transición energética hacia la neutralidad climática.

Para Zudaire, “la creación de la asociación demuestra la firme apuesta de empresas y entidades por avanzar en la descarbonización, y para ello, utilizar el hidrógeno como vector energético”. Fue más allá incluso, al añadir que, “la transición energética solo será sostenible si, junto al reto de la descarbonización, nos planteamos el compromiso de mantener el peso de la industria en el PIB. Debemos abordar una transición que permita desarrollar nuestra industria, crear riqueza y bienestar e impulsar nuestra innovación y tecnología”.

A su juicio, el Corredor Vasco del Hidrógeno reúne “todos esos ingredientes”, por lo que “no cabe ninguna duda que es un proyecto con y de futuro por el que Euskadi debe hacer una apuesta decidida para ser líder en este sector, como lo es en el acero, la máquina herramienta, el automóvil o las renovables”.

Origen

El Corredor Vasco del Hidrógeno tiene su origen en la decisión estratégica de Repsol de invertir en Euskadi en proyectos que supongan seguir avanzando en la transición energética y conseguir, así, su objetivo de ser una compañía cero emisiones netas en el año 2050. Además, Petronor ha apostado por convertir a Euskadi en un Hub del hidrógeno, haciendo virar definitivamente hacia una economía productiva verde.

En palabras de su presidente, Emiliano López Atxurra, “el País Vasco siempre ha sido protagonista de la industria energética española. Su fortaleza tecnológica e industrial ha venido del coraje de generaciones que apostaron por la innovación en sectores donde la energía era un componente esencial. Petronor es un vivo ejemplo de ello”. Ha recordado que “ocupamos el eje tecno industrial de una euroregión atlántica, con el desafío de conseguir peso y protagonismo significativos en el seno de la futura Unión Energética Europea. Y, sobre todo, somos un nodo que articula el eje atlántico y el eje del Ebro en su proyección europea”.

Proyectos y estrategia El proyecto del Corredor Vasco del Hidrógeno se fundamenta en una estrategia integral, que incluye decenas de proyectos de toda la cadena de valor, y pretende ser una palanca para transformar el tejido productivo y conseguir mantener el peso de la industria en nuestra economía.

En cuanto a su desarrollo se va a llevar a cabo en dos fases. La primera, que ya está en marcha y culminará en 2026, dispone de una inversión de 1.300 millones de euros que se traducirá en la producción de 20.000 toneladas de hidrógeno renovable al año y evitarán la emisión de 1,5 millones de toneladas anuales de CO2.

La inversión durante estos primeros años se destinará al desarrollo a la producción de hidrógeno renovable, infraestructuras y aplicaciones necesarias para el despliegue del Corredor Vasco del Hidrógeno.

Por un lado, destaca la inversión de 650 millones de euros en producción de hidrógeno renovable con una capacidad instalada de 112 Mw, para lo que se construirán tres instalaciones.

• La primera de ellas es un electrolizador de Petronor proyectado por la ingeniería Sener, que estará en funcionamiento en 2022. Se trata de la primera planta de electrolizadores del Estado destinada a la producción de hidrógeno verde. La planta contará con una capacidad de dos megavatios que alimentará el Parque Tecnológico de Abanto.
• La segunda de las instalaciones de Petronor, Ente Vasco de la Energía y Enagas, estará situada en el Puerto de Bilbao y operativa en 2024. Tendrá diez megavatios y su producción se destinará a la planta de combustibles sintéticos. Por último, la tercera instalación que entrará en funcionamiento en 2025 y tendrá cien megavatios, se dedicará a descarbonizar el proceso productivo de Petronor y a cubrir las necesidades del Corredor.
• Pero hay más, ya que el proyecto contempla también la creación de una planta de fabricación de biogás a partir de residuos sólidos urbanos para la producirá hidrógeno.

Otros 250 millones de euros se destinarán al desarrollo tecnológico e industrial y a fomentar la digitalización y otra partida de 50 millones de euros a proyectos de investigación relacionados con las aplicaciones del hidrógeno en movilidad: transporte de pasajeros, mercancías de largo recorrido (tren, aviación, naval); sector residencial, generación de calor y cogeneración para cubrir las necesidades de edificios comerciales o residenciales; e industria.

Participantes

ABC Compressors, Aena, Ajusa, Alsa, AMPO, ArcelorMittal, Astilleros Murueta, Ayuntamiento de Bilbao, Balearia, Befesa, Bilogistik, CAF, Calvera, Celsa Narvacero, Centro Nacional del Hidrógeno, CIC energiGUNE, Cidetec, CIE Automotive, Clúster de Energía, Diputación de Álava. Diputación de Bizkaia, Edair, Enagas, Ente Vasco de la Energía, Erreka, Ferrovial, Fg Fidegas, Foro Marítimo Vasco, Fundación para el Desarrollo de las Nuevas Tecnologías del Hidrógeno, Fundación Tekniker, Garbiker, GHI, GHK, Giroa Veolia, H2Site, Hispacold, Ibaizabal, Idom, Ikerlan, Ingeteam, Insertec, Integralia, Irizar, Irizar E-mobility, Jema Energía, Lecitrailer, Lurraldebus, MFS Sintering, Mobilityado-Avanza, Mondragon Unibertsitatea, Mubil, Naviera Murueta, Nippon Gases, Nortegas, Oliverdesign, Optimus 3D, Orkli, Parkes Tecnológicos de Euskadi, Petronor, Puerto de Bilbao, Repsol, Sarralle, Sener, Sidenor, Siemens Energy, SKV Bermeo, Solaris, Somorrostro, Talgo, TCR, Tecnalia, Técnicas Reunidas, Tubacex, Tubos Reunidos, Universidad País Vasco, Wartsila y Siderex.

áreas que aborda

• Producción de hidrógeno renovable y combustibles sintéticos.
• Movilidad-logística de distribución.
• Descarbonización de la industria.
• Usos urbanos y residenciales.
• Infraestructura.
• Desarrollo tecnológico industrial.