La factura de la luz de este invierno podría ser hasta un 45% más barata que la del mismo periodo del año pasado, concretamente en los meses de enero y febrero.
Con la referencia del gas entre los 30 y 35 euros el megavatio hora, la luz se enmarcaría entre 60 y 65 euros el megavatio hora; sin embargo, si la tensión del mercado rompe la "calma actual", el indicador TTF se moverá en el rango de 36 y 42 euros y la previsión del precio de la luz será de entre 80 y 85 euros, aun así, entre un 12% y un 22% más barata que en el invierno anterior.
Según ha explicado el director general de la consultora Tempos Energía, "Europa ha entrado de lleno en el invierno" y el TTF lleva parapetado en unos mínimos que no se habían visto desde hace 15 meses, situándose entre 30 y 31 euros el megavatio hora. "Nos encontramos ante un doble hito, contamos con un gas barato y estable y el invierno arranca desde un suelo real con un sistema cómodo, pero altamente sensible", ha añadido.
CONTENCIÓN DEL GAS
Desde la consultora energética han apuntado que el presente mes de noviembre está siendo "un mes de temperaturas anormalmente suaves", en el que un país como Alemania ha registrado "hasta cinco grados más por encima de lo habitual para estas fechas". El buen tiempo ha frenado el uso de la calefacción y de los ciclos combinados, revelando que la demanda europea se encuentra en los 140 teravatios hora, un 10% menos que en octubre.
Otro aspecto que explica el abaratamiento y estabilidad son los cargamentos de gas natural licuado que recibe Europa en la actualidad, un 38% más que hace un año, debido a que Asia sigue manteniéndose a la sombra y sin retirar cargamento. En este sentido, Aceituno ha recordado que, "mientras China no despierte, Europa tendrá una red de seguridad".
En este contexto, las reservas gasísticas se encuentran en torno al 82%, cifra que, aunque aún es un colchón, resulta ser más fina que la del año anterior, puesto que está 10 puntos por debajo de 2024. Mientras tanto, Noruega continúa siendo el principal proveedor de gas para Europa con una horquilla de 329 a 342 millardos de metros cúbicos. El CO2, por su parte, se muestra estable entre 81 y 82 euros por tonelada, fijando un suelo de costes para la electricidad.
El comportamiento del gas se sitúa en su nivel más bajo desde mayo de 2024, registrando un precio de 30,45 euros el megavatio hora, casi un 48% por debajo del máximo del año. Desde Tempos Energía apuntan a un precio de la luz para el primer trimestre de 2026 en la zona media a 64,55 euros el megavatio hora. El segundo cuatrimestre muestra un precio medio de 40,25 euros, apoyándose en los 36 y 39 euros del gas. Con el riesgo estival, el tercer trimestre tiene un precio medio de 66,51 euros, y el último trimestre del 2026 se anticipa en 71,76 euros el megavatio hora.
NOVIEMBRE, MARCADO POR LA EÓLICA
Durante el mes de noviembre, el mercado eléctrico ha dado un "profundo giro" con el 'pool' cayendo hasta 49,34 euros el megavatio hora. Esta bajada representa un 50% menos que hace un año y casi un 35% menos que en octubre, revelando un mercado con un precio medio hundido, con picos más suaves y un suelo extremadamente barato.
La explicación del desplome está relacionada con el 'mix' energético y, en especial, con la eólica. El viento ha sido el "rey en el tablero de ajedrez", subiendo en las horas solares y al anochecer, franjas anteriormente ocupadas por el gas. "Si la energía eólica se mantiene, podríamos hablar de un invierno entre 50 y 70 euros el megavatio hora", ha señalado el director general de Tempos Energía.
Con días fríos y sin viento, el sistema dependerá de los ciclos combinados, pudiendo el 'pool' saltar a 105-120 euros. "La clave se encuentra en mitigar el riesgo asegurando parte del consumo antes de episodios de frío sin viento", añade Aceituno.
EL BRENT "NADA EN LA ABUNDANCIA"
Por su parte, el barril de petróleo Brent está cotizando en 61,88 dólares, cerca del precio más bajo vivido a principios de mayo (60,31 $). El exceso físico del Brent hace que su precio sea débil, y la banda entre 60-70 dólares ha sido la más repetida en la mitad de las sesiones de este año. Aceituno indica que el Brent posee un "precio demasiado bajo para que la OPEP+ se acomode, pero tampoco lo bastante como para reforzar recortes agresivos fuera de la alianza". "El precio suelo de 60 $/barril funciona como zona de congestión y no como trampolín".
El exceso físico de crudo se debe a que, desde abril, la OPEP+ ha devuelto 2,9 millones de barriles diarios, mientras que Estados Unidos bombea 13,6 millones diarios, y países como Brasil y Guyana siguen aumentando producción. Los mercados financieros también reflejan superávit, con los fondos de inversión pasando de comprar 119 millones de barriles a vender casi 20 millones. China, el gran comprador marginal, ha perdido impulso, y la geopolítica no altera significativamente el Brent. Un escenario de tensión podría hacer rebotar al Brent a 75-80 dólares, mientras que con sobreproducción y menor demanda china, el soporte de 60 dólares podría caer a 50-55 $/barril.