- El dueño de la empresa siderúrgica vasca Acería Compacta de Bizkaia (ACB), el grupo Arcelor Mittal, ha marcado unas previsiones de producción de cara al presente ejercicio de 2021 para la planta vizcaina del orden de las 45.000 toneladas de acero en bobinas al mes, unas 540.000 al año, todavía muy lejos del millón y medio de toneladas que ha llegado a producir, aunque no descarta que la acería de horno eléctrico que sustituyó a la siderurgia integral de la antigua Altos Hornos de Vizcaya (AHV) pueda ir incrementando la carga de trabajo progresivamente a lo largo del año, siempre y cuando la pandemia de coronavirus no tenga nuevos rebrotes que lastren el crecimiento económico previsto.

De materializarse la mejoría contemplada y verse la empresa en la tesitura de aumentar la producción en ACB, el grupo Arcelor Mittal podría volver a contratar casi medio centenar de personas adicionales a la actual plantilla, según fuentes de la empresa acerística.

Durante el pasado año, su objetivo mensual de producción era de 40.000 toneladas y se ha cumplido, e incluso superado, durante los meses en los que estuvo abierta, ya que, como consecuencia de la pandemia y del confinamiento decretado, permaneció cerrada desde marzo hasta mediados de septiembre.

La acería vasca ha cerrado el pasado ejercicio con un ebitda positivo, aunque esa rentabilidad todavía es “mínima” y está “en valores bajos”.

Aunque estos datos habría que ponerlos en cuarentena porque en el ERTE del pasado año el grupo alegó tener importantes pérdidas en España, al igual que en 2019, algo que la Audiencia Nacional cuestionó al rechazar el ERTE en diciembre porque Arcelor Mittal actuó, según la Audiencia, “en fraude de ley”, ya que los resultados netos de las 17 sociedades del grupo Arcelor en el Estado en su conjunto en 2019 arrojaron unas ganancias de 345 millones de euros.

Las perspectivas para este nuevo año son, según recoge Europa Press, “mejores” y se está valorando la posibilidad de poder incrementar la carga de trabajo de la planta de Sestao progresivamente a lo largo del ejercicio del ejercicio, en el que inicialmente se arranca con el citado objetivo de producir 45.000 toneladas al mes.

Según fuentes del grupo Arcelor Mittal, esas mejores perspectivas están vinculadas al proceso de descarbonización que está viviendo la industria y, en concreto, la ACB, al ser una acería de horno eléctrico al igual que la de la antigua Aristrain de Olaberria y la de AHB en Bergara, está menos penalizada por el coste de los derechos de emisión de CO2.

Por lo tanto, la ACB se ve beneficiada, desde ese punto de vista, frente a otras plantas del grupo y, dentro de la apuesta por la descarbonización del proceso de producción de acero que está acometiendo la empresa y teniendo en cuenta esos costes, se está analizando la posibilidad de aumentar la carga de trabajo en las plantas con menores derechos de emisión de CO2 como la de Sestao.

No deja de ser curioso que Arcelor apueste ahora por las plantas de horno eléctrico, como ACB, que utilizan chatarra, o sea, material reciclable, cuando no hace mucho se centraba en las plantas de siderurgia integral que utilizan mineral de hierro y carbón, como las de Asturias, mucho menos sostenibles.

En la actualidad, la ACB cuenta con 200 trabajadores.