Bilbao - El Gobierno vasco ha arrancado el año con una de sus principales asignaturas aprobada. El acuerdo con Elkarrekin Podemos en torno a los Presupuestos garantiza que Euskadi dispondrá de los recursos financieros necesarios para hacer frente al nuevo ciclo económico, caracterizado por un menor ritmo de crecimiento y previsiblemente mayores necesidades de estímulo de la actividad de las empresas.

Tras un año de prórroga presupuestaria tras la ruptura de los puentes con el Partido Popular debido al apoyo del PNV a la moción de censura a Mariano Rajoy y la negativa de EH Bildu y la formación morada a apoyar al Gabinete de Iñigo Urkullu, el deshielo parlamentario deja fluir de nuevo los recursos y aumenta el caudal notablemente. Es una tarea que el Ejecutivo español sigue teniendo pendiente y, tras su investidura, Pedro Sánchez tendrá que afrontar una compleja negociación con los partidos de la oposición para garantizarse herramientas financieras con las que darle un empujón al PIB en la actual fase de ralentización.

El gasto previsto en las cuentas vascas asciende a 11.774 millones de euros, diez millones menos que el presupuesto prorrogado del año pasado, lo que supone un retroceso testimonial de un 0,08%. En definitiva, el dinero del que dispondrá Lakua será el mismo dentro de una estrategia de gasto adaptada a las exigencias del ciclo. Además, a efectos prácticas el presupuesto operativo, el dinero disponible para inversión, aumenta en 301 millones de euros, casi un 3%, debido al descenso de las amortizaciones de deuda en este ejercicio.

La política de contención de endeudamiento de los últimos años, en los que no se ha agotado el límite de endeudamiento, está dando sus frutos. Con algo más de un 12% de ratio de deuda sobre su PIB, Euskadi es la comunidad menos hipotecada, y está muy lejos del nivel del Estado, que roza en estos momentos el 97%. Al mismo tiempo, el Departamento de Hacienda y Economía decidió el año pasado anticipar la amortización de 473 millones para aligerar la carga financiera.

Es lo que el consejero de Hacienda y Economía, Pedro Azpiazu, definió a mediados de octubre como una "inversión de futuro", pero que se va a empezar a notar ya en el margen de inversión del Ejecutivo.

¿En qué aspectos del ámbito económico va a incidir el Gobierno los próximos meses? Siguiendo el orden del organigrama departamental de Lakua, Euskadi volverá a contar este año con el Fondo de Innovación adscrito a Lehendakaritza y que estará dotado con 40,6 millones de euros, en línea con el compromiso de incrementar el gasto destinado a I+D un 5% anual.

El Departamento de Desarrollo Económico e Infraestructuras dispondrá este año de más 960 millones y destaca el incremento hasta los 175 millones del programa Finkatuz, destinado a tomar participaciones en empresas para garantizar su anclaje a Euskadi. La primera operación de Finkatuz fue la toma de una participación de 15 millones de euros en CAF y el objetivo es decidir en este primer semestre el destino del resto de los recursos. Ya se han detectado en torno a 100 sociedades que cumplen los requisitos fijados y la cartera de participaciones del Ejecutivo crecerá los próximos meses. La consejería de Arantxa Tapia también ha aumentado en casi 14 millones los programas del Plan de Ciencia y Tecnología vasco.

Por su parte, el Departamento de Empleo y Políticas Sociales superará este ejercicio los 1.030 millones y ha reforzado con 22,5 millones más las políticas de Formación y Empleo.

La consejería de Hacienda y Economía dispondrá este año de casi 55 millones de euros. Uno de los entes públicos adscrito a este Departamento, el Instituto Vasco de Finanzas, será precisamente el que materialice las inversiones previstas en el programa Finkatuz.