madrid - La factura de la luz ha subido el 4,1% en el mes de julio, terminando así con una racha de nueve meses consecutivos de caídas en su precio, aunque sigue siendo un 7,4% más barata que hace un año.

La factura para un consumidor tipo -con una potencia contratada de 4,4 kilovatios y un consumo anual de 3.000 kilovatios hora (250 KWh al mes)- acogido a la tarifa regulada ascendió en julio a 56,43 euros, lo que supone una subida de 2,23 euros respecto a junio, según el simulador de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). No obstante, respecto a julio del año pasado, el descenso es de 4,51 euros.

En el mercado mayorista se repitió el mismo patrón y la luz se encareció un 9% respecto a junio hasta los 51,5 euros megavatio hora (MWh), pero se mantuvo un 20,3% por debajo de lo que costaba en julio del año pasado, según el barómetro de la Asociación de Empresas con Gran Consumo de Energía (AEGE).

De hecho, para este mercado se espera que el precio medio de la energía para lo que queda de año sea de 52,9 euros, un 8% por debajo del precio medio de 2018. No obstante, el precio en el mercado mayorista se situó en julio un 37% por encima del mercado francés y un 30% más caro que el alemán.

La cotización a futuro para 2020 del precio en el mercado eléctrico español en 2019 es de 52,9 euros por MWh, un 1,7% más caro que hace un mes.

El precio provisional de la luz en el mercado diario para hoy, 1 de agosto, es de 48,21 euros, más de un euro superior a los 47,11 euros de ayer.

fin a las caídas La subida de julio pone fin a nueve meses seguidos de bajadas en el precio de la luz que dieron un respiro importante al bolsillo de los consumidores. La última de estas bajadas, en junio, fue del 5% para situar el recibo un 8% más barato que un año antes. El repunte de julio, sin embargo, acorta este descenso interanual al 7,4%, lo que sigue suponiendo un ahorro significativo.

Pese a esta moderación, la asociación de consumidores Facua advierte de que en cualquier caso el usuario no se encuentra, ni de lejos, en un nuevo escenario de precios bajos. Facua critica que los beneficios de las grandes eléctricas siguen disparados gracias a la pasividad del Gobierno español ante sus infladas tarifas.

La asociación reclama medidas contundentes para abaratar la factura eléctrica que sufren los usuarios. Demanda, además, la intervención del sector, de manera que sea el Ejecutivo el que fije periódicamente los precios sobre la base del coste real de la producción energética y se