DONOSTIA. El todavía secretario general de ELA, Adolfo "Txiki" Muñoz, se ha despedido este viernes de sus compañeros de militancia con un "agur rebelde" en el congreso que su sindicato celebra en Donostiaen el que ha defendido un "sindicalismo reivindicativo" que no acepta relaciones "clientelares con nadie".

Muñoz ha pronunciado su último discurso como líder de ELA en el cónclave extraordinario que la central vasca celebra en el Palacio Kursaal, en el que será relevado en el cargo por el sindicalista navarro Mitxel Lakuntza.

"Txiki" Muñoz, quien deja la secretaría general de ELA por razones de edad, al cumplir los 60 años, tal y como marcan los estatutos, ha considerado un "honor" haber liderado este sindicato al que augura un "futuro espléndido".

"ELA ha sabido crecer pero no sólo numéricamente. Ha crecido sobre todo en posición ideológica y esto es fundamental en estos tiempos en los que casi todo es banal y líquido", ha defendido.

Ha asegurado que ELA se mantiene firme en su defensa de "la soberanía" del pueblo vasco y de un "modelo social alternativo sin aceptar relaciones de subordinación o clientelares con nadie".

Ha valorado la "cohesión interna" que existe en la central y ha aplaudido a la militancia, al tiempo que ha defendido las "alianzas sindicales y sociales en clave de contrapoder y lucha".

Ha reconocido que "probablemente" el fortalecimiento de dichas alianzas sea la "mayor debilidad" del sindicato, que se ha "esforzado" en este aspecto y que no dejará pasar ninguna "oportunidad" que exista al respecto.

Muñoz ha apostado por un sindicalismo reivindicativo y autónomo, ha recalcado que los intereses de la clase trabajadora "no son materia secundaria" y ha considerado que "el neoliberalismo es voraz y destructivo, un enemigo que no hay que subestimar".

En el apartado de agradecimientos, Adolfo Muñoz ha querido dar las gracias a su compañera, a sus amigos y a los militantes, a los jóvenes, a las mujeres de ELA, a sus compañeros del comité ejecutivo y también a "toda la gente que, incluso con sus críticas", les "obliga a reflexionar".

Muñoz ha aprovechado su despedida para pedir el apoyo de la militancia a la nueva dirección que saldará del congreso extraordinario.

"El secretario general de ELA pone voz a una reflexión colectiva y cuando le critican nos critican a todos", ha remarcado Muñoz, quien ha asegurado que "los políticos cuanto más mediocres son más personalizan". "No se dan cuenta de que nos resbala", ha zanjado.

Sus últimas palabras han sido para los políticos independentistas "encarcelados en Cataluña", para los presos de ETA y para los jóvenes de Alsasua (Navarra) condenados por agredir a dos guardias civiles y a sus parejas en octubre de 2016.