Donostia - La fábrica Candy Hoover Electrodomésticos en Bergara fue cerrada por decisión de su propietario, el grupo italiano Candy, que aseguró ayer que la “situación de pérdidas estructurales” en la planta le obligó a esa medida. La compañía pone fin así a la producción de lavadoras de carga superior en las instalaciones guipuzcoanas, las únicas que posee en el Estado, que será trasladada a China, donde posee una fábrica desde hace dos años. La consecuencia directa de este cierre es que perderán su puesto de trabajo unas 150 personas que desarrollaban su actividad en la planta bergararra.

Desde hacía meses Candy Hoover vivía en plena incertidumbre y la plantilla ya había advertido de que la empresa estaba calibrando la posibilidad de clausurar la fábrica, algo que finalmente se produjo ayer. A través de un comunicado, el Grupo Candy informó de que se veía “obligado” a cesar la producción en Bergara por las pérdidas continuadas, motivadas por el hecho de que “el coste unitario de fabricación de la lavadora de carga superior es mayor que el precio de venta del producto”.

La medida de cierre se recoge en el plan de viabilidad desarrollado por el Grupo Candy después de que, aseguró la firma italiana, “no hayan dado resultado los intentos de hacer rentable la producción” de la lavadora de carga superior en esas instalaciones. La empresa señaló que en los últimos años “se han puesto en práctica medidas de regulación y reducción de costes” pero, añadió, “el descenso del precio de venta del producto ha hecho inevitable la decisión de cierre”. La planta guipuzcoana cuenta con una plantilla de 170 personas de las que 150 entrarán en un ERE de extinción que la dirección ya ha comenzado a negociar con los representantes legales de los trabajadores. Unos veinte empleados, pertenecientes a los departamentos de administración y comercial, mantendrán sus puestos de trabajo pero se verán obligados a desplazarse a otras instalaciones en Barcelona.

Pérdidas continuadas

La compañía no se halla en dificultades económicas ni arrastra deudas que le pudieran abocar a un concurso de acreedores. Sin embargo, sí ha registrado pérdidas tanto en Candy Hoover Electrodomésticos como en el grupo a nivel internacional, unos números negativos que calificó de “estructurales”, razón por la cual optó por cerrar la fábrica de Bergara y fabricar las lavadoras de carga superior en Bergara, si bien decidió seguir fabricando lavadoras de carga superior únicamente en su planta en la ciudad china de Jiangmen.

Se trata de una fábrica que inauguró en 2012 y que cuenta con últimas tecnologías, también para la fabricación del modelo de lavadoras que se producían en Bergara. Candy pretende así “conseguir ajustar los costes con objeto de que puedan mantenerse las ventas de ese producto en Europa, que se han reducido un 20% en los últimos cuatro años, mientras los costes crecen de forma ininterrumpida”.