Si vas a viajar en avión este verano, ten presente que para poder embarcar no es suficiente con tener el billete y con cumplir a rajatabla los horarios que marca la aerolínea. Te puedes encontrar con que el personal de tierra de la compañía te puede denegar el acceso al aparato por diferentes motivos.

Para evitar sorpresas de última hora en el aeropuerto, es importante conocer bien las causas que pueden llevar a la aerolínea a tomar dicha decisión. Una de ellas, la más habitual, es el overbooking y en ella poco o nada puede hacer el pasajero.

Esta situación se plantea cuando una aerolínea vende más billetes que el número de asientos que tiene disponibles. Es una práctica legal pero controvertida y la compañía está obligada a reubicarte en el siguiente vuelo disponible, a ofrecerte asistencia (comida, alojamiento y si es necesario transporte) y a darte una compensación económica.

Una mujer espera en el aeropuerto a que salga su vuelo.

Otras causas de denegación de embarque

El overbooking, sin embargo, no es el único motivo por el que un pasajero se puede quedar en tierra. Las aerolíneas están obligadas a garantizar la seguridad y la convivencia dentro del avión por lo que hay otros motivos de denegación que se consideran una especie de sanción al pasajero

Cada aerolínea suele recoger en el condicionado del contrato de transporte su propio listado de motivos, por los que puede impedir volar a un cliente, incluso cuando ya ha adquirido los billetes. Algunos de ellos son:

Conducta inapropiada o peligrosa

La aerolínea puede impedir el embarque, sin derecho a compensación, a aquellas personas que:

- Presenten síntomas de embriaguez o de consumo de drogas.

- Mantengan una actitud agresiva o amenazante con el personal de tierra, la tripulación o el resto de viajeros.

 - Desobedezcan las instrucciones del personal de la compañía.

- Hayan causado incidentes similares en vuelos anteriores. Quienes figuren en la lista negra verán cómo, tras adquirir un billete, la compañía les reembolsa el dinero sin más explicaciones y lo anula.

Documentación incompleta o incorrecta

No basta con tener el billete, sino que hay que presentar toda la documentación exigida por las autoridades del país de destino. Por ello, la compañía, sin obligación de reembolsarte el billete, te puede impedir subir al avión si:

- No presentas un pasaporte o un DNI válido.

- Si los datos del billete no coinciden con los del pasaporte o DNI.

- Tu visado no es correcto o ha caducado.

- No cumples con los requisitos sanitarios (certificados de vacunación obligatorios).

Vista trasera de los pasajeros de un avión en sus asientos.

Cuestiones de salud o seguridad

Si la aerolínea detecta que el pasajero no está en condiciones de volar desde un punto de vista médico o si su estado representa un riesgo para los demás, puede impedir tomar el avión ofreciendo la posibilidad de un reembolso o de un cambio de fecha del billete. Puede prohibir el acceso a:

- Personas que necesiten asistencia médica específica y no la hayan solicitado con antelación.

- Pasajeros con síntomas visibles de enfermedad contagiosa.

- Casos de movilidad reducida cuando el vuelo no está equipado para cubrir las necesidades del pasajero.

Vestimenta inapropiada o normas de higiene

Algunas aerolíneas incluyen entre sus condiciones cláusulas sobre vestimenta y aspecto personal, que en ocasiones pueden llegar a ser discriminatorias y suponer un abuso de poder por parte de la compañía, por lo que es posible reclamar. Algunos supuestos son:

- Llevar ropa ofensiva, sucia o rota.

- No cumplir con el código de vestimenta mínimo (acudir en bañador, sin camiseta o con ropa interior a la vista).

- Presentar un estado general de higiene deficiente.

Qué hacer si te niegan el embarque

Si crees que te han vetado por un motivo subjetivo o discriminatorio, siempre puedes reclamar. Para ello debes seguir cuatro sencillos pasos: pide una explicación por escrito de la negativa, solicita el formulario de reclamación en el mostrador de la aerolínea, guarda todos los comprobantes relacionados con los gastos derivados del veto y, si no obtienes respuesta o solución, reclama ante la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA).

Ten muy presente que, si consideras que la medida ha sido injusta, tienes derecho a reclamar. Estar informado y conocer tus derechos es la mejor forma de defenderte ante cualquier veto inesperado.