Apenas dos semanas de pretemporada han precedido a la primera prueba seria del Lointek Gernika, que abre hoy ante el Kutxabank Araski la Euskal Kopa en el Polideportivo Landako de Durango (18.00 horas). Este año el torneo tendrá un formato triangular y mañana jugaran a la misma hora las gasteiztarras y el IDK Euskotren y cerrarán el domingo las donostiarras y las gernikarras. Los tres equipos tienen muchas novedades y pocos entrenamientos aún en sus piernas, por lo que no cabe esperar duelos brillantes, aunque sí emocionantes, como suele ser habitual.

“Es muy pronto para poder competir a buen nivel”, advierte Mario López, que no obstante está satisfecho por el trabajo de sus jugadoras y espera que estos partidos permitan ver si “aquellos sistemas y detalles que estamos trabajando están interiorizados y si sirven o no”. “Apenas hemos podido entrenar cinco contra cinco, pero poco a poco iremos creciendo y nos tomaremos esta Euskal Kopa como lo que podemos ofrecer en este momento, después de diez días de entrenamiento, nos servirá para ajustar un poquito y ver el comportamiento del equipo”, señala el técnico del Lointek Gernika, que tendrá la baja segura de Rosó Buch, en recuperación aún de la operación de tobillo que sufrió este verano en el tobillo, y la duda de la lituana Gaby Meskonyte, que pasó por el mismo trance en una rodilla a principio de año.

Será, en todo caso, la primera oportunidad de ver con la camiseta gernikarra a Roselis Silva, Tinara Moore y Melisa Brcaninovic, tres de los fichajes para esta campaña, y quizás también a la junior Irune Orio, que está ayudando en la preparación.

Enfrente estará un Araski también muy cambiado que ha añadido mucha calidad anotadora con Tinaya Atkinson y Julia Gladkova y con la novata Katerina Zec, además de otras jugadoras con experiencia en la Liga Femenina como Leia Dongue y la vizcaina Gracia Alonso de Armiño, con pasado en el equipo gernikarra.

“Nos tomamos esta Euskal Kopa como lo que podemos ofrecer en este momento”

Entrenador del Lointek Gernika