Winged Foot sacó sus garras en la segunda jornada del US Open y el torneo ya está en unos números más cercanos a su fama. Jon Rahm acabó con dos golpes sobre par para un total de +1 tras firmar tres birdies y cinco bogeys en un día opuesto al jueves. Ayer, con más viento y más dureza alrededor de las banderas, apenas cogió seis de catorce calles y solo la mitad de greenes en regulación y así era complicado restar golpes, pese a que sus estadísticas de putt mejoraron claramente. Pero lo que podía haber sido en otra cita un registro pobre se convirtió en el recorrido de Mamaroneck en algo valioso que dejó al de Barrika entre los once primeros y a solo cuatro golpes de distancia de Patrick Reed y Bryson DeChambeau, los líderes al cierre de esta edición.

Sin concluir aún la jornada, solo dos jugadores habían jugado bajo par (el propio Bryson DeChambeau y Bubba Watson) y solo seis estaban bajo par después de las dos jornadas, por lo que la vuelta de Rahm, pese a que no fuera satisfactoria, tomó valor con el paso de las horas y le deja con todas las opciones abiertas de cara al día del movimiento. Arrancó por el hoyo 10 con birdie y bogey, pero desde el inicio se vio que no tenía la precisión a green del día anterior y tuvo que enfrascarse en una labor de recuperación.

Los problemas llegaron en el 17 y el 18 con sendos bogeys que le hicieron caer varios puestos y cerraron la primera mitad de la vuelta con malas sensaciones. Cayó otro golpe de más en el 3, pero Rahm no se dejó vencer, tuvo paciencia y mantuvo la pelea con el campo al que le sacó dos excelentes birdies en el 7 y el 8 para mejorar claramente posición. Quedaba el hoyo 9, el más fácil del día, pero una mala elección de su segundo golpe le llevó al green en desventaja y se anotó otro bogey que lamentó con rabia porque no tocaba. De momento, los pares 5 de Winged Foot se le han resistido y le han costado algunos golpes que habrían dado más brillo a su tarjeta.

En todo caso, se anuncia que para el fin de semana el campo va a estar aún más complicado y Jon Rahm saldrá con todo por ganar en un torneo que no perdona a nadie y que ayer se quedó sin Tiger Woods, Phil Mickelson, Henrik Stenson, Justin Rose, Gary Woodland, Tommy Fleetwood, Sergio García, Jordan Spieth y los otros dos jugadores vascos. Adrián Oteagui y Mike Lorenzo-Vera acabaron igualados con diez sobre par y no jugarán el fin de semana en Winged Foot.