Bilbao - Jon Rahm arranca en Hawái su cuarto curso como profesional consolidado ya como uno de los mejores golfistas del mundo y con la esperanza de mejorar aún más sus brillantes resultados de 2019. El de Barrika se ha acostumbrado a derribar barreras y 2020 se le presenta lleno de retos porque a su presencia habitual en los dos lados del Atlántico se unirán los Juegos Olímpicos de Tokio y la Ryder Cup, eventos en los que Rahm tiene presencia asegurada. Quien más, quien menos, alimenta el deseo de que el vizcaino gane su primer major, algo que nadie duda que conseguirá en algún momento de su carrera, pero las prisas no son buenas consejeras en el golf y Jon Rahm sabe que quizás tenga que quemar etapas poco a poco.
Su último año fue una demostración de solidez, de acumular puestos entre los diez primeros como si fuera fácil, y esa es la línea a seguir desde esta madrugada en el Plantation Course de Kapalua, donde se disputa el Sentry Tournament, cita que reparte los primeros dólares y puntos del año y que reúne a los ganadores del curso anterior en el PGA Tour. Rahm, el jugador que más torneos ha ganado en los últimos tres años, llega como número 3 del mundo, el mejor de todos los presentes, a un torneo en el que fue segundo hace dos años y octavo el anterior. Nunca ha estado tan cerca de la cima del golf mundial y eso también puede ser un objetivo, pero de nuevo se trata de seguir jugando bien. Su última salida oficial a un campo fue para ganar la final de Dubái y el Circuito Europeo y después del segundo puesto en el no oficial Hero World Challenge, llegaron las emociones de diciembre que desembocaron en su boda. Ahora el contador vuelve a cero y Hawái marcará de nuevo el inicio del curso gracias a la victoria que logró en mayo en el torneo de parejas de Nueva Orleans junto a Ryan Palmer.
La exigencia es máxima como lo demuestra que en el Sentry Tournament debuten quince jugadores, esto es quince golfistas que estrenaron su palmarés la pasada temporada en casi un tercio de los torneos disputados en el PGA Tour. En Hawái faltarán por distintas razones figuras que tenían plaza como el lesionado Brooks Koepka, Shane Lowry, Rory McIlroy, Phil Mickelson, Francesco Molinari, Justin Rose y Tiger Woods, que acaba e cumplir 44 años y se reserva para citas mayores, pero eso no resta calidad al torneo ya que, además de Jon Rahm, en la lista de 34 participantes están vencedores en Kapalua como Dustin Johnson, Xander Schauffele, Justin Thomas y Patrick Reed, además de otros ilustres como Gary Woodland, Rickie Fowler, Matt Kuchar o Paul Casey para sumar once de los quince primeros del mundo.
Jon Rahm quiere ser selectivo y prácticamente calcará su calendario de 2019. Tras Hawái, parará dos semanas y luego afrontará consecutivamente el Farmers Insurance de Torrey Pines, donde abrió su palmarés profesional, y el Phoenix Open que se juega al lado de su casa en Scottsdale. Tras otra semana sin competir, jugará el Genesis Open y el WGC de México. Serán las primeras citas de un año en el que se espera mucho del golfista de Barrika porque se lo ha ganado.
