EL Barakaldo se ha nutrido este verano de un buen puñado de futbolistas procedentes de otros territorios del Estado. En este sentido, llama la atención la numerosa presencia de jugadores con acento canario. Adrián Hernández (Las Palmas de Gran Canaria, 1992), Josué Medina (San Cristóbal de La Laguna, 1996) y Samuel Arbelo (Santa Úrsula, 1996) ya están integrados en el grupo, al que pronto se unirá Fede Olivera (Maldonado, 1995), uruguayo criado en Canarias desde los siete años. Los de Lasesarre han arrancado con paso firme. Junto al Salamanca, son los únicos que han vencido los dos duelos disputados por el momento. Mañana a las 18.00 horas, ante el Izarra, intentarán dar una nueva alegría a su afición en el único choque de la categoría de bronce que se jugará este fin de semana en suelo vizcaino.

Josué y Samuel han llegado cedidos por el Tenerife, con el que también se ha acordado el préstamo de Fede. El primero se estrenó en Segunda B el pasado domingo por la puerta grande, al firmar la diana que abrió la lata en la visita a un Guijuelo que no conocía la derrota en casa en 2019. “Fue el debut soñado. Suelo meter goles, pero tampoco demasiados, soy más de dar asistencias”, reconoce el extremo, que agradece la buena acogida de sus compañeros. “Es la primera vez que salgo de Canarias y se echa de menos, pero los capitanes se acercaron a mí el primer día y me dijeron que estaban ahí para lo que necesitara”, explica quien comparte piso con el guipuzcoano Iker Olaizola.

Mañana podría producirse el debut de Josué en Lasesarre, después de que “en el primer partido se lesionó un compañero justo cuando iba a entrar y me quedé con las ganas, así que estoy deseando que llegue el momento y poder darle otra alegría a la afición”. El que ya sabe lo que es jugar ante la exigente parroquia gualdinegra es su compañero Samuel, que también ha arrancado con buen pie su andadura en el Barakaldo, pues ha disputado los dos partidos al completo. “Llegar a un equipo nuevo, en el que ya llevaban semanas trabajando, y que el míster haya apostado por mí es para estar muy contento, sobre todo por los triunfos que hemos logrado”, subraya el central. Ante el Izarra espera dar continuidad a la buena racha y “hacer de Lasesarre un fortín”.

El buen inicio del Barakaldo llama aún más la atención si se tiene en cuenta que solo continúan cinco jugadores del curso anterior y que el entrenador, el asturiano Hernán Pérez, es nuevo. A ello hay que sumar que en el vestuario se mezclan futbolistas de siete comunidades autónomas distintas e incluso un peruano. Además, en la plantilla prima la juventud, como refleja el hecho de que la pasada jornada la alineación fabril fuera la de menor media de edad, sin contar filiales, de toda la Segunda B. “Se respira buen ambiente en el grupo. Es importante que seamos amigos, porque eso se trasmite en el campo. La unión que tenemos ha sido importante para arrancar tan bien”, apunta Samuel.

Cedido por el cuadro chicharrero se unirá también el lateral diestro Fede. “Me estoy recuperando de una lesión y acordamos que acabaría de hacerlo aquí antes de viajar. Estoy en la recta final y espero llegar en dos semanas”, explica quien antes pasó por las canteras de Real Madrid y Las Palmas. “Josué y Samuel me comentan que les han acogido muy bien y tengo muchas ganas de estar allí y competir, además he visto los dos partidos y me ha encantado el equipo, muy competitivo pese a su juventud”, destaca.

Quien no llega del Tenerife es Adrián, delantero que viene de quedarse a las puertas del ascenso a Segunda con el Atlético Baleares, al caer contra el Racing en la eliminatoria de campeones y ante el Mirandés en la ronda definitiva. “Ojalá podamos aspirar a cotas tan altas, pero todavía es pronto para pensar en eso. Ahora lo que tenemos que hacer es intentar ganar el máximo de partidos posibles”, expone este ariete que tiene como objetivo “coger la forma cuanto antes” para empezar a dar alegrías. “Ya he marcado goles en Lasesarre con Las Palmas Atlético y Burgos, ahora quiero meterlos como local”, rememora Adrián, quien matiza que “no me suelo poner una meta de goles, porque depende de muchos factores, pero estaría bien superar las dos cifras”.