Osasuna0

Eibar0

OSASUNA: Rubén; Nacho Vidal, David García, Hernández, Estupiñán; Roberto Torres (Min. 87, Brandon), Moncayola, Brasanac, Rober Ibáñez; Chimy Ávila (Min. 80, Juan Villar) y Marc Cardona (Min. 66, Rubén García).

EIBAR: Dmitrovic; Tejero, Oliveira, Sergio Álvarez, Arbilla (Min. 87, Pedro León); Orellana (Min. 67, Edu Expósito), Pape Diop, Escalante, De Blasis; Sergi Enrich (Min. 63, Charles) y Kike García.

Árbitro: Medié Jiménez (Comité Catalán). Tarjeta amarilla a Nacho Vidal, Chimy Ávila, Brasanac y David García por Osasuna y a Sergio Álvarez, Oliveira, Charles y Arbilla por parte del Eibar.

Incidencias: El Sadar, 13.978 espectadores.

iruñea - Osasuna y Eibar empataron un partido marcado por la igualdad, la brega y el despliegue físico, en el que las ocasiones más claras corrieron a cargo de los jugadores rojillos. Bajo un intenso calor, Osasuna y Eibar protagonizaron unos primeros minutos en los que abusaron del juego directo y la búsqueda de segundas jugadas, mostrando poca continuidad en la circulación de balón, aunque entregándose físicamente.

Fueron los rojillos los que dieron un paso adelante y quisieron llevar las riendas ante su afición, buscando constantemente al siempre dinámico Chimy Ávila, el jugador más destacado de los locales por brega y sus constantes desmarques y caídas a banda.

El cuadro armero solo generó algo de inquietud en un par jugadas a balón parado, aunque Rubén no tuvo demasiado trabajo bajo los palos del arco osasunista, mientras que la defensa del Eibar sí tuvo que emplearse a fondo.

En la recta final del primer tiempo, Osasuna jugó sus mejores minutos, rozando el gol en un tiro lejano de Moncayola que Dmitrovic desvió a córner y con otro disparo que Roberto Torres, en posición franca dentro del área, cruzó demasiado a la izquierda. El colegiado también anuló un tanto del argentino Chimy Ávila de cabeza, por fuera de juego.

El paso por vestuarios pareció sentar mejor a los pupilos de Mendilibar, que crecieron en intensidad y control del juego en los primeros compases, ganando metros a base de internadas por las bandas y creando algo de nerviosismo en la zaga rojilla. Aún así, Osasuna rozó el tanto en una gran jugada con pase de la muerte de Cardona a Chimy Ávila, quien puso la puntera para empujar el esférico y se topó en última instancia con una buena salida de Dmitrovic.

Conforme se iba acercando el final, tanto locales como visitantes expusieron más argumentos ofensivos. Ambos conjuntos querían dominar y estiraron líneas en busca un gol que decantara la balanza.

Pudo el Eibar llevarse el gato al agua con dos faltas directas botadas por Arbilla y De Blasis, respectivamente, pero sus intentos se fueron por encima de la portería defendida por Rubén y prevaleció el empate hasta el pitido final.