manchester-oporto - Pep Guardiola dijo ayer, durante la rueda de prensa previa al partido que hoy disputará el Manchester City con el Tottenham Hotspur, que parte con la ventaja (1-0) del partido de ida, que no vino al equipo apadrinado por los Emiratos Árabes para ganar la Champions, si bien añadió que es su deseo y que le encantan estos retos. Lo que sí quiso dejar claro el técnico catalán es que su misión es otra,. “No vine aquí para ganar la Champions. Vine aquí para hacer jugar al equipo de la manera en la que han jugado en los últimos veinte meses. Por eso vine”, explicó.

“No va a ser parecido (a la ida)”. Hay que marcar goles y Guardiola pidió “crear una atmósfera para que nuestros aficionados nos apoyen”. Guardiola no quiso pensar en una posible final con el Barcelona, pero afirmó que vería el Barça-Manchester United en lugar del Juventus-Ajax, partido de donde saldría su rival en semifinales si el City accede a ellas.

Por su parte el entrenador de los Spurs, Mauricio Pochettino, se da por recompensado por haber alcanzado los cuartos de final. “Pase lo que pase mañana, vamos a estar orgullosos de nuestro camino en la Champions, pero eso no quiere decir que no vayamos a pelear”, afirmó el técnico argentino.

Después de una temporada casi impoluta, el Manchester City se juega la joya de la corona, la Champions, en el Etihad Stadium ante un Tottenham Hotspur que parte con ventaja de la ida, pero que tendrá que lidiar con la baja de Harry Kane, fundamental en el equipo londinense, y no solo por sus goles, y con un rival volcado a por la victoria.

La versión conservadora y atemorizada del City que se vio en White Hart Lane la semana pasada desaparecerá. Pep Guardiola llegó a la eliminatoria con el miedo de que se le descontrolase, como le ocurrió contra el Mónaco hace dos años, y con el Liverpool la campaña pasada, pero ahora ya no podrá especular.

Oporto-Liverpool En el otro partido de cuartos de final que se juega hoy, el Oporto de Iker Casillas buscará otra vez voltear el marcador en Do Dragão, como ya hizo frente al Roma en octavos de final, ante un Liverpool que no quiere oír hablar de sorpresas y que parte de un claro 2-0 a favor, además de la superioridad exhibida en Anfiel.

Sérgio Conceição, técnico del equipo luso, no reservó jugadores en el encuentro del sábado ante el Portimonense (0-3) porque se está jugando la liga portuguesa con el Benfica, con quien está igualado a puntos.

El Liverpool sabe que tiene gran parte de la eliminatoria encarrilada, pero los precedentes de la competición no le dejan lugar para la confianza y además afrontan el choque tras un duro compromiso liguero con el Chelsea, al que vencieron por 2-0. - DEIA/Efe