MÁS de 400 kilómetros, cerca de 19 horas sobre el sillín y acompañantes de lujo como Pedro Horrillo son algunos de los ingredientes del nuevo reto de Igor Antón, que se ha empecinado en recorrer sobre dos ruedas todo el territorio histórico. El exciclista de Galdakao quería demostrarse a sí mismo que es capaz de organizar un evento de estas características diez meses después de retirarse del mundo profesional. El valor social del deporte de la bicicleta estará presente en el desafío, que empezará y terminará en el Puente Colgante, un punto “muy representativo de Bizkaia”. El pistoletazo de salida será mañana a las 5.00 horas.

A lo largo de todo el trayecto se irán incorporando al pelotón de Antón otros corredores como Julián Sanz, toda una “eminencia” de retos ciclistas de este calibre, según indica el protagonista. Antes de pasar por Urkiola, en Abadiño, Mikel Zarrabeitia y Joserra Uriarte se unirán también para correr unos kilómetros, pero será Antón el único en completar una etapa que podría alargarse hasta medianoche.

Uno de los objetivos de la marcha es homenajear a Bizkaia, con un recorrido que pasa por los cuatro puntos cardinales de la geografía: el faro de Matxitxako (norte), el puerto de Orduña (sur), Lanestosa (oeste) y Ondarroa (este). El respeto y el recuerdo a la historia ciclista también estarán presentes. “En el puerto de Trabakua tengo intención de sacar una lambretta vieja, de la época de la bicicleta eibarresa de los 60 y 70”, cuenta entusiasmado el de Galdakao. Y a pesar de no tratarse de una competición, Antón buscará completar el recorrido el mismo viernes. Según sus cálculos, se ve capacitado para realizar la mitad del trayecto a 27 kilómetros por hora, aunque la media sería de unos 24. “Si juntas las paradas con la media más baja, me da que voy a estar en la bici más de 19 horas. Me gustaría completarlo en el día, esa es la pequeña competición”, destaca Antón.

Preparar este reto no es sencillo y menos si se trata de un novato en ultrafondo. Resistir y pedalear durante tanto tiempo requiere de un gran aporte enérgico y una preparación. Según explica Antón, la clave es reservar energías y consumir alimentos que se digieren bien, y no los de rápido aporte enérgico, ya que se trata de resistir. “Estoy mentalizado para comer bastantes hidratos los dos días de antes”, comenta el exciclista.

Otro de los principales objetivos de la prueba impulsada por Antón es la de sensibilizar a la sociedad sobre una enfermedad bastante desconocida: “Tengo un conocido que tiene un familiar con una enfermedad rara -distrofia muscular congénita por déficit de merosina-. Para la causa repartiremos unas pulseras”. Antón invita a la gente a informarse más sobre esta patología en la web ImpulsaT.

El futuro depara sorpresas e incertidumbre y para el exciclista del Euskaltel Euskadi, entre otros equipos, el desafío de mañana podría ser la primera piedra de una futura marcha multitudinaria, “nunca se sabe”, añade . Lo que está claro es que Igor Antón intentará completar una carrera pionera en Bizkaia, acompañado de su bicicleta y de un foco, vital para no tener problemas en la carretera en las horas con menos luz. La respuesta del público, al igual que la meteorología -la probabilidad de lluvia es alta-, son una incógnita, pero Igor Antón se muestra dispuesto y comprometido a completar el trayecto pase lo que pase.