Lointek Gernika 87

LOINTEK GERNIKA BIZKAIA: Moore (20), Arrojo (6), Ginzo (13), Bjorklund (3), Ariztimuño (9) -cinco inicial- Silva (3), Alberdi (0), Brcaninovic (4), Orio (0), Roundtree (12), Buch (12).

IDK EUSKOTREN: Cornelius (10), Madden (12), Cvitkovic (16), Harden (9), Brown (15) -cinco inicial- Soriano (0), Díaz (9), España (0).

Parciales: 23-14, 45-37 (descanso), 69-52 y 87-71.

Árbitros: Bravo, Checa y González. Sin eliminadas.

El Lointek Gernika Bizkaia lució sus mejores galas en el derbi ante el IDK Euskotren y logró un triunfo tan contundente como espectacular que recordó a esas grandes citas de plena comunión entre el equipo y la grada de Maloste. Desde el primer minuto, las jugadoras de Mario López marcaron la diferencia con su intensidad defensiva y un ritmo altísimo en ataque, de la mano de una enorme Itzi Ariztimuño. Las donostiarras pronto se quedaron atrás y no tuvieron opciones de engancharse al partido porque cada vez que amagaban con ello el Lointek Gernika era capaz de apretar de nuevo. Al margen del resultado, lo positivo estuvo en el debut de Irune Orio en la Liga Femenina y que tres vizcainas coincidieron en cancha. Entre lo malo, quedó la lesión de Angie Bjorklund, que sufrió un golpe en el hombro al inicio del segundo cuarto y ya no pudo jugar más.

Tuvo mérito por ello que el equipo gernikarra alcanzara los 87 puntos con apenas cuatro triples anotados y sin sus dos mejores tiradoras, la estadounidense y Gaby Meskonyte, que aún sigue de baja. Sin embargo, el movimiento de balón fue casi inmejorable para lograr posiciones ventajosas en el ataque posicional o al contragolpe, faceta en la que Margaret Roundtree no tenía defensora que le pudiera seguir y así seis puntos suyos contribuyeron a la primera ventaja importante (21-12).

El IDK Euskotren, que venía de dos derrotas ante el Valencia y el Avenida, no logró más que hacer la goma porque su ataque no podía con la defensa gernikarra, muy agresiva en los cambios y en las líneas de pase. En el otro lado, Tinara Moore era un seguro en la zona y un 37-32 fue lo más cerca que estuvieron de ahí al final del partido las de Azu Muguruza, con un ataque que tenía que tirar de calidad individual para buscar soluciones. Mario López cortó ese amago de reacción con un tiempo muerto y un parcial de 6-0 puso la brecha por encima de los diez puntos.

La segunda parte vio a un Lointek Gernika aún más decidido que quiso resolver por la vía rápida y lo consiguió. Belén Arrojo se multiplicó en todas las tareas hasta lograr quince rebotes y Rosó Buch dio un paso adelante en ataque. La mataronina aprovechó perfectamente que la defensa donostiarra le dio espacio y con un triple suyo las locales alcanzaron su máxima diferencia (62-41) después de permitir solo una canasta y dos tiros libres al IDK Euskotren en más de seis minutos. El derbi estaba ya perfectamente amarrado y ni siquiera la aparición de Stephanie Madden, con ocho puntos seguidos, alteró un guion que condujo a un intercambio de canastas en el último cuarto y al disfrute de una afición con ganas de resarcirse de esa larga ausencia de su pabellón.

"Hemos controlado muy bien todo el partido con una actuación muy completa. Hemos encontrado muchos espacios en ataque y hemos tenido mucho acierto. Sin meter triples también se puede llegar a 90 puntos", resumió Mario López.