“Esta victoria nos da mucha alegría y un poco más de calma. Llevábamos bastantes jornadas haciéndolo bien, pero no tuvimos la suerte de llevarnos los tres puntos. Hoy (por el domingo) con el partido que hemos hecho los puntos se quedan en Urritxe y todos nos vamos con una sonrisa”. Así refleja Unai Marino, capitán del Amorebieta, el sentir del vestuario tras sellar por fin la primera victoria del curso después de batir al Ourense, con lo que el colectivo azul, que no pudo en los partidos anteriores como local ante la Gimnástica Segoviana y Nàstic, volvía a ganar en liga en Urritxe 447 días después de hacerlo en la final de campeones de Primera RFEF ante el Racing de Ferrol.
Marino, único jugador que se mantiene en la plantilla tras la fuga de todos su excompañeros con la pérdida de la categoría en LaLiga Hypermotion, fue además uno de los artífices de este éxito al detener un penalti en el primer acto con el 0-0 en el marcador. “Teníamos varios registros de sus delanteros, he optado por quedarme ahí y ha salido bien”, subrayó el guardameta.