Haritz Mujika (Pasaia, 13-XI-1981) ejerce ya como primer entrenador del Amorebieta, vigésimo clasificado en LaLiga SmartBank a siete puntos de la permanencia a falta de doce jornadas para la conclusión del campeonato. Asimilada la sorpresiva destitución de Iñigo Vélez de Mendizabal en la noche del martes, el hasta entonces segundo técnico del conjunto zornotzarra ha dirigido ayer miércoles su primer entrenamiento en Artunduaga, donde ha estado arropado por el presidente Jon Larrea. Sin tiempo que perder ante el inminente choque liguero de este domingo ante el Eibar en Iprurua, el preparador guipuzcoano se ha trasladado acto seguido hasta Urritxe, lugar en el que ha sido presentado bajo la compañía del propio Larrea y del director deportivo Asier Goiria.
Los dos, sin querer ahondar en las causas que han motivado el cese del técnico gasteiztarra, se han mostrado convencidos de que era el momento del cambio y que la plantilla no ha dicho su última palabra en una categoría en la que los azules buscarán la salvación mientras las matemáticas no les den la espalda. El reto, mayúsculo para Mujika, no intimida lo más mínimo a un hombre sin experiencia en los banquillos como primer entrenador desde que colgara las botas como futbolista del Amorebieta en 2019. Su primer objetivo es que los futbolistas hagan “borrón y cuenta nueva” a fin de sacar adelante una compleja situación deportiva que pasa por tener “mentalidad positiva, ganadora y recuperar cosas que al principio hacíamos y que poco a poco, quizás por los resultados y por vernos abajo en la clasificación habíamos dejado de hacer”.
Se ha referido el de Pasaia, concretamente, a “volver a hacer esa presión alta del inicio de temporada con esa agresividad defensiva que nos caracterizaba. Les he dicho a los jugadores que quedan 36 puntos en juego y tenemos que ir a por los 36”. Así de ambicioso se ha mostrado Mujika, quien ha desvelado cómo se fraguó su conversión en primer entrenador del Amorebieta: “El martes a mediodía me llamó Asier antes de su reunión con Iñigo para decirme si estaba preparado para coger el equipo y yo estoy para ayudar al club, por lo que si tenía que dar un paso al frente debía darlo”. “No tengo mucha experiencia como entrenador, pero sí ganas e intentaremos arreglar las cosas dentro del campo y convencer al equipo de que podemos conseguir el objetivo en las doce jornadas que faltan”, ha incidido el preparador guipuzcoano, quien ha reconocido asimismo que “para mí es una gran responsabilidad, porque nunca había estado en esta situación y a nivel personal también es una gran oportunidad que espero aprovechar y qué mejor que hacerlo manteniendo al Amorebieta en Segunda”.
Respecto a sus planes inmediatos, Mujika ha adelantado que “no voy a hacer ninguna revolución, porque este equipo está hecho para jugar de una manera y con un sistema de juego”. “Se pueden modificar cosas, pero ya os digo que no habrá una revolución contra el Eibar”, ha agregado el de Pasaia, quien ha resaltado acto seguido que “lo que hemos hecho hasta ahora no nos ha valido y tenemos que mejorar”. En cuanto a su primera toma de contacto con los jugadores tras su nombramiento como primer entrenador del cuadro zornotzarra, Mujika ha afirmado que “los chavales están entrenando de maravilla durante toda la temporada jueguen o no y les he visto bien, enchufados y con ganas. Hemos tenido una pequeña charla y parece que esto va a buen puerto y que es necesario un cambio”.
DECISIÓN “MUY DIFÍCIL”
Jon Larrea, por su parte, ha apuntado que prescindir de los servicios de Iñigo Vélez de Mendizabal, el artífice del histórico ascenso a LaLiga SmartBank. “Lo más fácil hubiera sido no tomar ninguna decisión y seguir igual, pero las circunstancias del fútbol son las que son y sabemos que somos el Amorebieta y que no tenemos que perder la cabeza, pero debemos intentarlo todo, la dirección deportiva nos puso sobre la mesa esta opción y confiamos en Asier Goiria. A partir de ahora estaremos con Haritz y tenemos toda la confianza también en él”, ha reivindicado el presidente del club zornotzarra, consciente de que “habrá gente que lo entenderá y gente que no”.
Asier Goiria, máximo responsable del área deportiva de la entidad azul, ha admitido también que “el martes fue un día muy complicado para nosotros y para mí hubiera sido muy cómodo seguir igual, no hacer nada y todos tan amigos, pero queremos seguir en Segunda División y para eso a veces hay que tomar decisiones no populares para las cuales estamos aquí”. “Sé que la gente puede pensar que estamos en esta categoría de pasada, pero no estamos cumpliendo con los objetivos marcados a principio de temporada y entendíamos que necesitábamos tomar esta decisión por muy dura que fuera y ahora tenemos que estar todos unidos para conseguir sacar esto adelante”, ha destacado el propio Goiria, quien también se ha referido a la figura de Mujika.
Cuestionado por el motivo que le ha llevado a confiar en el guipuzcoano, el director deportivo del Amorebieta ha asegurado que “teníamos claro el perfil de entrenador que necesitábamos, no podíamos volvernos locos como club y viendo nuestras circunstancias hemos visto claro apostar por Haritz, que conoce la plantilla y su mensaje va a llegar muy claro al equipo. Se puede pensar que es una continuación de Iñigo, pero eso se verá en el día a día y creemos que es lo que necesitaba el equipo”.