Ibon Garate, todoterreno rumbo al Parejas

Mungia - A Ibon Garate (Algorta, 1986) se le aparecieron los fantasmas el pasado viernes en el frontón de Mungia. “Tenía bastante presión, porque me estaba jugando las alubias”, desgrana el palista, todoterreno, que jugó en su época de aficionado como zaguero y delantero. La cuestión es que Innpala le había programado dos enfrentamientos como previa para entrar en el Campeonato del Mundo de Parejas, que se presentó ayer en Mungia. El de Eskuinaldea rivalizó con Ander Landeta, quien cuajó una buena actuación en el primer asalto y se llevó el gato al agua (3-1). Al día siguiente, con zagueros cambiados, el guion se reescribió. “Me fui cabizbajo, pero el sábado vine con la idea de salir a por todas y que pasase lo que tendría que pasar. Urrutia me acompañó y le dimos la vuelta”, evoca. El 3-0 impulsó a Garate hacia el Parejas en su primer curso profesional.

Innpala contrató al vizcaino en noviembre, con el inicio de la Liga Kutxabank, puesto que la baja de Erik Zubiri dejó una vacante en la delantera de la promotora. “Hace unos años, Asfedebi me ofreció debutar, pero acababa de regresar a Euskadi después de seis meses viviendo en Australia y pedí algo de tiempo para encancharme”, confiesa. Eso fue en 2009. Nueve cursos más tarde le llegó la alternativa a un palista prolífico. “Ahora me parto la cara con los mejores”, agrega Garate.

Recuerda Ibon que sus inicios con el leño se remontan a cuando tenía cinco años. “Mi aita jugaba campeonatos y yo le iba a ver. Al terminar, me quedaba con mi pala jugando yo solo. Comencé mi formación en Getxo y luego pasé a Sopela con Erlantz Zulaika”, desbroza Garate. Su primer viaje por la pelota fue a República Dominicana para hacer de esparrin. Después, cuenta experiencias en Venezuela, Uruguay, Estados Unidos? “En Caracas participé en un torneo internacional con Euskal Selekzioa y ganamos a los profesionales Zulaika-Aierbe por 40-39. No se me olvidará. Yo jugaba con Ernesto Olano”, desvela. Otra experiencia que le marcó fue en Oceanía. “Fui a crear una escuela de pelota en Australia. Pasé medio año enseñando mano y pala a chicos y chicas de allí, pero rápidamente dejaron la mano, porque era muy dura”, afirma. “Llegué con un inglés batallero. Estaba instalado en la parte norte de Queensland. Había poca vida social y fue duro. A veces echaba de menos mi casa, pero fue enriquecedor”, define el delantero de Eskuinaldea.

El mismo formato de juego Su siguiente estación, después del salto al profesionalismo, está en el Parejas, que se desarrollará de forma íntegra en el frontón Municipal de Mungia, como en las últimas cuatro ediciones. Así las cosas, desde el Consejo Mundial, organismo que rige la competición, se volverá a tirar de un formato que no incluye binomios fijos y en el que habrá combinaciones diferentes en cada jornada. Las funciones comienzan esta semana y la liguilla de semifinales se jugará todos los viernes hasta el 5 de abril (19.00 horas). Cada pelotari sumará su propia puntuación por encuentro y los dos mejores de cada demarcación disputarán la final del 13 de abril, a partir de las 17.00 horas. Gaubeka, Necol, Fusto y el de Algorta serán los delanteros en liza, mientras que en los cuadros largos participarán Ibargarai, Ibai Pérez, Urrutia y Gordon. Landeta será el suplente en los cuadros alegres, pero no designaron ningún zaguero sustituto al no haber más fondo de armario en la plantilla.

Pablo Fusto ha ganado las últimas cuatro txapelas y es el rival a batir. “Siempre agradecemos venir aquí, ya que hay muy buen ambiente. Además, jugamos con el formato más justo que hay”, desgrana el argentino.