Bilbao. ¿Están viviendo unos días muy ajetreados?
Sí, estamos a tope, porque no es solo el festival. Además de las sesiones y el certamen, tenemos varias actividades como el Open de Slackline, en el que hacemos una exhibición de Waterline en la ría de Bilbao y unos cursos para que la gente pueda iniciarse en el equilibrismo. También tenemos clases, exposiciones fotográficas, clinics... Todo esto lleva un trabajo tremendo.
¿Qué es el Mendi Film?
Es un festival internacional de cine de montaña, aventura y deportes extremos. Y al rededor de él, confluyen una serie de sinergías y actividades relacionadas con el festival. Pretendemos que se convierta en un referente en el nivel de las películas, pero también que sea algo más. Poco a poco lo vamos consiguiendo y ahora es la actividad relacionada con el mundo de la aventura y la montaña con el programa más amplio a nivel estatal.
¿Qué es más difícil: subir una montaña o preparar un evento de esta magnitud?
Las montañas requieren muchas horas de entrenamiento y planificación, pero quizás, hay una gran parte que depende solo de ti. Sin embargo, en un festival hay muchísimas cosas que se escapan de tu propia capacidad de hacer las cosas. Hay una cantidad de variables que no se pueden controlar, como en la montaña. Pero ahí tú decides si subes o no y el Mendi Film se tiene que hacer sí o sí y en las fechas fijadas.
El Mendi Film es un festival que se adapta a Euskadi.
La montaña es parte fundamental de la cultura, la sociedad e incluso la economía vasca, porque hay muchas personas que se dedican a ello. La Federación Vasca es la segunda con más federados del Estado, solo por detrás de Catalu-nya. La geografía de Euskadi está llena de montañas y de aquí han salido grandes alpinistas.
¿Cómo ha evolucionado el festival?
Año a año ha ido creciendo hasta situarse entre uno de los festivales más importantes del mundo y una referencia importante. El festival ha crecido muy rápido, desde el principio, gracias a que la gente que vino a las primeras ediciones habló muy bien del Mendi Film.
¿Qué siente rodeado de las grandes figuras del alpinismo?
Es un placer, porque si te gusta la montaña o el cine y tienes la oportunidad de estar con los más grandes, es un sueño. A muchos ya les hemos conocido en otras expediciones, pero que vengan a tu casa, al festival, a mostrar sus mejores trabajos o las ultimas aventuras que han realizado, en primicia... Es una satisfacción muy grande.
¿Cómo animaría a la gente a acercarse al festival?
Van a tener la oportunidad de ver en Bilbao algunas de las mejores producciones a nivel mundial del alpinismo, montaña, escalada... y además van a poder conocer a muchos de esos protagonistas en vivo. El programa es muy variado en actividad y horarios y tienen cantidad de películas para elegir. Además, en esta época hace frío y apetece entrar a un sitio a disfrutar de una actividad como esta.
¿Qué futuro prevé para el Mendi Film?
El futuro es muy bueno, porque todos los indicadores muestran eso. El reto de ahora es atraer a aficionados de otras provincias y también ir aumentando las actividades que van alrededor del festival y a la larga, hacerlas durante todo el año, no solo en el mes de diciembre.