bilbao. La noche bilbaina se llenó de corredores dispuestos a enfrentarse a los 42,195 kilómetros de la Bilbao Night Marathon. Una carrera que estuvo marcada, una vez más, por el dominio de los atletas etíopes, que no dieron ninguna opción al resto de participantes. La contundente victoria de Suleman Abran Shifa puso luz a una maratón nocturna sin grandes marcas para el recuerdo.

Los fuegos artificiales que alumbraban la noche bilbaina dieron el pistoletazo de salida a la Bilbao Night Marathon. Espoleados por el gran ambiente, todos los corredores salieron dispuestos a batir sus propios objetivos. Era el momento de hacer valer las numerosas horas de entrenamiento. Unos luchaban por la victoria, otros contra el crono y una gran cantidad de participantes buscaban cumplir su sueño de terminar una maratón. Mil participantes con un reto en mente.

La baja de última hora de Tewodros Zewdu, ganador de la anterior edición y máximo aspirante a llevarse la victoria, abrió la lista de favoritos. Pero la ausencia del vencedor del año pasado no acabó con el dominio etíope. Suleman Abran Shifa, Gerzaw Bekele y Birhanu Mekonnen rápidamente se pusieron en cabeza y empezaron a dejar atrás, uno a uno, a todos los que trataron de seguirles.

Los etíopes se batieron en una batalla magna. Codo con codo. Luchando por cada pulgada. Solamente el más fuerte podía ganar y ese fue Shifa. El dorsal número dos marcó un poderoso ritmo y dejó atrás a sus acompañantes de fuga. Bekele perdió diez metros con respecto al líder de la prueba y ya nunca los pudo recuperar. El resto de los corredores vieron cómo era prácticamente imposible dar alcance a la dupla etiope. Al final, Shifa cruzó la meta brazos en alto con una marca de 2 horas 21 minutos y 44 segundos. Seis minutos y 28 segundos más tarde llegó Bekele y Mekonnen terminó tercero a 13 minutos y dos del ganador de la prueba. Un podio venido de Etiopía que alumbró otra gran Bilbao Night Marathon.