Insistentes

Duración: 1 hora, 6 minutos y 9 segundos. 23:48 de juego real.

Saques: 1 de Berasaluze VIII y 1 de Arretxe II.

Pelotazos: 489 pelotazos a buena.

Tantos en juego: 12 de Berasaluze VIII, 3 de Albisu, 6 de Arretxe II y 3 de Begino.

Errores: 6 de Berasaluze VIII, 6 de Albisu, 1 de Arretxe II y 3 de Begino.

Marcador: 1-1, 2-4, 5-5, 6-5, 6-6, 7-10, 7-11, 8-11, 9-12, 10-14, 11-15, 12-15, 17-16, 18-19, 18-20, 19-21 y 20-22.

Incidencias: Media entrada en el Astelena de Eibar para el partido correspondiente a la segunda jornada del Parejas de Primera.

eibar. No fue el día de Pablo Berasaluze. Empezó tímido y sin encontrar su juego el berriztarra, pero aun así sumó un total de doce tantos frente a dos tótems, con un físico privilegiado, impenetrables, rápidos e insistentes; sobre todo eso, insistentes. Fueron los azules, con Iker Arretxe en los cuadros alegres sobrado en la defensa y Aritz Begino rompiendo el frontis, dos rocas de inmensa dureza: firmes como nunca. Aunque quizás pequen de no tener la misma alegría que otras parejas a la hora de terminar el tanto, a base de forzar el fallo y endurecer el juego con cortadas rapidísimas y batalla detrás y en el cruce de caminos; tanto Iker como Aritz hicieron un buen partido. No brillante, pero sí serio y efectivo.

El mayor problema de Pablo Berasaluze y Jon Ander Albisu fue acumular demasiados errores cuando no habían sido forzados. Así, a pesar de que el ataundarra causó muchos problemas a Begino en un duelo de bulldozers, sumó seis fallos en momentos clave, con pelota franca, y que les fueron poco a poco aplastando. Además, el inicio del mago de Berriz no estuvo a la altura de las expectativas. Después de llevar unos meses en un momento dulce en el que todo lo que le sale de la mano se convierte en gloria, el delantero tuvo en el Astelena una tarde plúmbea, alquitranada asimismo por la necesidad de Arretxe de no entrar en batalla directa allí donde Pablo es el mejor, en el remate. Y es que, una muestra fue que sin estar en buen momento, Berasaluze consiguió aclarar su hoja de ruta después de sumar doce tantos en jugada.

Pero la consistencia, la insistencia y el físico de sus rivales desequilibró la balanza. En los cuadros largos, los dos pelotaris se enzarzaron en una pelea de gallos, en una batalla de bombarderos, en la que Begino salió vencedor porque no falló tanto. Hasta el 10-14 en el marcador, fueron los azules los que dieron la sensación de tener toda la situación controlada. El delantero de Luzaide y el guardaespaldas de Autza fueron los que dominaron todo ese tramo.

Pablo, entonces, carburó e igualó las cosas hasta alargarse hacia el 17-15. No pudo continuar por su buena senda el sacrificado delantero vizcaino, quien acusó tamaña gesta y encajó una tacada de tres tantos que dio moral y espacio a sus rivales. Ya era tarde. No era el día.