BIZKAIA GERNIKA: Dias, Lasa, Iraizoz, Astarloa, Zabaloy, Magunazelaia, Hernández, Amosa, Oreja, Cusack, Mazzochi, Wilson, Torres, Salas y Montagut. También jugaron: Bilbao, Urrutia, Monge, Lopategi, Latorre y Olaeta.
ROVIGO: Quaglio, Gatto, Ceglie, Tumiati, Montauriol, Persico, Jones, De Marchi, Wilson, Duca, Zorzi, Sevealli, Van Niekerk, Pedrazzi y Lenarduzzi. También jugaron: Anouer, Datola, Lombardi, Maran, Menon, Zanirato, Basson y Ciochina.
Marcador: 7-0, m. 40, Ensayo de Magunazelaia, transforma Cusack; // 7-3, m. 49: Golpe de Puca; 10-3, m. 64: Golpe de Cusack; 13-3, m. 76: Golpe de Cusack.
Árbitro: David Wilkinson (Irlanda). Amarillas al local Astarloa y el visitante Gatto.
gernika-lumo. El nombre de Gernika quedará escrito con mayúsculas en la competición europea tras obtener ayer su primera victoria en la Amlin Cup. En su primer año de participación, el club basurde se une a Biarritz y Baiona en lo que a victorias internacionales de equipos vascos se refiere tras derrotar 13-3 al Rugby Rovigo italiano. Cuando se conoció la conformación de los grupos, los transalpinos parecían el único rival batible y los gernikarras, en un choque tremendamente igualado, lograron su propósito gracias a su gran trabajo defensivo y al acierto mostrado en ataque, aprovechando al máximo sus oportunidades.
El Bizkaia Gernika sabía que tenía que salir muy concentrado desde el inicio y presionar al máximo, y así lo hizo. Así, en los primeros compases, los verdinegros jugaron rápido, moviendo el oval de un lado a otro. El marcador pudo abrirse al cuarto de hora, pero la marca obtenida por Magunazelaia -que fue designado el mejor jugador del partido- fue anulada por el colegiado. Sin embargo, el capitán gernikarra pudo resarcirse al filo del descanso.
Hasta ese minuto 40, el duelo fue una lucha constante por la posesión del oval y por cada metro de campo, casi en todo momento con los gernikarras llevando la iniciativa. Cuando todo parecía indicar que se llegaría al descanso con las tablas iniciales, el samoano Afa Amosa se abrió hueco entre la defensa italiana y dejó un balón en franquía a Magunazelaia que no desaprovechó el obsequio.
de poder a poder Con la euforia instalada en las gradas de Urbieta, el segundo tiempo comenzó con el Rovigo buscando más arriba al Gernika, generando cierta incertidumbre. Un golpe de Puca a los 10 minutos apretó el tanteador, pero los italianos eran frenados casi siempre fuera de la línea de veintidós. Por contra, los contragolpes verdinegros hacían daño a los visitantes. Dos lanzamientos a palos de Cusack terminaron de sellar el histórico triunfo que tanto jugadores como seguidores celebraron con alborozo.
El segunda línea Oscar Astarloa, que ayer volvió a ejercer de entrenador ante la ausencia de Jorge Giménez por motivos de salud, se mostró contento por "lograr una victoria, que era nuestro objetivo" en la competición. Desde ayer, la nueva meta será atar la tercera plaza. "Sería bonito. Ganar allí será más difícil, pero ya sabemos el camino visto lo visto hoy", opinó al respecto del duelo del próximo fin de semana.