bilbao. Después de varios días de incertidumbre por el estado de salud de Juan Martínez de Irujo, aquejado desde la pasada semana de un proceso gripal, el de Ibero disipó ayer sus dudas en el frontón Bizkaia de Bilbao, ejercitándose en compañía de Jokin Etxaniz, técnico de Aspe, y Aritz Lasa, un delantero muy habilidoso dentro del Cuatro y Medio que ya ha servido en más ocasiones de sparring para el navarro dentro de la jaula. En una sesión de poco más de una hora, el delantero pudo valorar su estado físico de cara a la semifinal que le une a Aimar Olaizola, afirmando que "no habrá excusas".
"Estoy cansado después del entrenamiento. La verdad es que he notado que tengo mucha fatiga en mi cuerpo, pero soy optimista porque todavía quedan cinco días para descansar", desveló el delantero de Ibero, quien apostilló que "estamos a martes y ojalá pueda estar al cien por cien para el domingo. Yo voy a hacer todo lo posible para estar a tope, pero quedan cinco días y los voy a aprovechar al máximo". Aseveró el manista de Ibero, quien continuaba con la voz tocada de los problemas de la gripe, "me canso más que otros días, la verdad. Hemos hecho un entrenamiento con muchos parones para no cargar mucho. Aunque me hubiera gustado estar mejor". Y es que, buscó el manista en la sesión de trabajo no asfixiarse dados los rigores de la fiebre, que remitió el lunes. Así, Etxaniz planteó un entrenamiento en el que "primero, hemos hecho jugadas. Después, hemos jugado un partidillo con Aritz, siempre con muchos parones, y al final, unas jugadas con Jokin", relató Juan. Una hora de trabajo "sin mucha exigencia" para no forzar la máquina del iberoarra, que volverá mañana a ejercitarse en Bilbao, tal y como hará Aimar Olaizola, que aprovechó el pasado domingo para fajarse con el puntillero vizcaino Mikel Urrutikoetxea, rival habitual en el Bizkaia.
"Me he sentido raro, con las piernas cansadas por las secuelas de la fiebre, y un poco espeso: no tenía las ideas muy claras", comentó Martínez de Irujo, que agregó que "saldré con todas las consecuencias a jugar contra Aimar y si me gana será porque ha sido mejor que yo". Asimismo, manifestó Juan que "hubiera preferido jugar el domingo, porque estos aplazamientos no me gustan. Prefiero jugar cuanto antes y que salgan las cosas bien".
En principio, la final sigue prevista para el 2 de diciembre, por lo que el vencedor de la semifinal del domingo solo tendrá, a priori, una semana de descanso. Irujo analizó ayer tal situación y desveló que "siempre ha habido quince días para preparar una final, aunque yo soy partidario de jugar el día 2 si el domingo y el lunes me encuentro perfectamente. Pero lo primero es ganar el domingo".