CALMEC: Borja Lucas (2), Ekaitz (2), Lander (2), Juan (2), Fernando (4), Gontzal, Iker (2), Bordegaray (1), Alberto, Mikel (1), Iban, Julen (8), Borja y Oier (7).

TRAPAGARAN: Sendoa, Momeñe (1), Sarasola (2), Envil, Marín, Lafuente (6), Alonso (4), Fran, Aldama (1), Otegi (1), Somavilla (1) y López de Araia (9).

Parciales: 0-2, 3-3, 6-7, 10-8, 11-10, 15-12; 18-13, 20-17, 23-19, 26-22, 29-23, 31-25.

Árbitros: Fernando Iñan y José Manuel Aceituno excluyeron a Borja, Ekaitx, Lander (2), Fernando (2), Iker y Oier del Calmec; y a los visitantes Alonso, Otegi y Rubén.

bilbao. Dos puntos de oro. Por ser logrados en un derbi y por dejar aún con posibilidades de permanecer en la categoría a un Calmec que se jugará la vida en la última jornada. De momento, los barakaldarrak hicieron los deberes ante el Trapagaran, y eso que el nerviosismo hizo mella en los primeros instantes del encuentro.

Sin embargo, a medida que transcurrieron los minutos, el Calmec fue tomando el control del partido, con una defensa ordenada y contraataques efectivos. Los locales se agarraron a sus mejores armas, la velocidad y las transiciones, para llevarse un encuentro que en ningún momento se antojó sencillo. El Trapagaran fue a remolque en todo momento, pero el encuentro resultó igualado en la primera mitad ya que el Calmec no era capaz de marcharse en el marcador.

En la segunda parte todo cambió. El Trapagaran demostró su calidad y su potente juego, pero no pudo evitar ver cómo el partido se le escapaba sin que pudieran remediarlo; y, poco a poco, fueron entregándose a la victoria local.

El gran culpable de la derrota de El Valle fue Julen Azpitarte que con ocho tantos fue el quebradero de cabeza de Marín, portero visitante. El guardameta realizó un buen encuentro, pero nada pudo hacer ante la efectividad del extremo del Calmec. Julen llevaba realizando una temporada gris e irregular, pero con una segunda parte de ensueño pudo desterrar todos sus fantasmas.

Última jornada Con esta victoria, el Calmec depende de sí mismo para salvarse ya que el triunfo ante el Colindres le colocaría fuera de los puestos de descenso. Será un difícil partido en una olla a presión.