bilbao. "Ansioso", describe Roberto García Ariño, técnico de Asegarce, el estado anímico de Patxi Ruiz. Rabioso, ávido de victorias. No en vano, el de Lizarra lleva desde el 25 de enero sin colocarse el gerriko en su cintura, sin vestir su torso de azul o colorado, sin llegar a una cancha en busca del cartón 22. Apartado por la promotora bilbaina del Parejas y enfadado por ello, el navarro optó por lavar los trapos sucios en los medios. De ahí su exclusión hasta el Manomanista. De ahí también su ansia. De ahí la incógnita de su juego.
"Sé que Patxi ha entrenado bien. Asimismo es capaz de jugar muy bien y de manera muy fácil si tiene las ideas claras", señala Ariño. Destaca el técnico la clarividencia de ideas como uno de los obstáculos del zaguero, que puede acusar la ansiedad de desear enseñar su valía. "Intentará demostrar de un pelotazo que está bien y que puede hacer más en el campeonato que pasar de eliminatoria", añade. Las molestias físicas que el de Lizarra arrastró en el pasado parecen haberse quedado en el olvido. "Ya me encuentro bien físicamente, pero Begino es el favorito", explicó el navarro en la presentación del torneo. De esa manera, también descargaba sus hombros de presión. "Patxi está bien", desgrana así la coraza de Ruiz el vizcaino, que no olvida que "lo psicológico es fundamental. Tiene que sujetarse y jugar tranquilo". Apela al control de la ira, terapia ante la ansiedad, a la contención. Ocurre que cuando la desazón se apodera del de Lizarra, sus neuronas se desgastan, su físico se muele y los fallos afloran y no dejan ver al que fascinó en 2003 y es un fijo de la empresa en los grandes torneos, superando incluso diferencias amplias con Asegarce. Por ello, el tejido cerebral posee tanta importancia en su juego.
"La vez anterior le ganó fácil", evoca Roberto el duelo que en 2008 el de Lizarra tumbó a Aritz. 22-11. Réquiem para el de Auza. Sucumbió Begino tras realizar un campeonato en el que Koka y Pascual fueron muescas en su fusil. "Ruiz tiene más tablas, pero el precedente no sirve para nada. Ahora las cosas han cambiado y Aritz ha cogido más experiencia", admite. "Yo veo un duelo igualado sin favorito claro. Puede pasar cualquier cosa".
cansancio y aburrimiento Acodado en el azul de su elástica aparecerá Begino. "Tiene que acertar con el saque y con el golpeo. Si manda se acaba todo", declara García Ariño. El juego enérgico del de Auza es un arma de doble filo. Tan fuerte son los zarpazos del zaguero, que necesita mayor oxígeno. "Tiene un estilo tan violento que termina por cansarse", sentencia. La economía de esfuerzos no entra en el vocabulario de Begino, que asfalta su pegada de sacrificio a toda velocidad. Impulsando su adrenalina a base de bofetadas al cuero. "Puede pasar rápidamente de dominar a ser dominado", agrega el entrenador. "También le puede pasar factura el aburrirse tras un largo peloteo. Tiene que aprender a sufrir", desvela el de Atxondo. Sucede que el de azul padece de inquietud cuando el cuero llega muy peloteado. Cuando el cuero alcanza demasiadas veces el frontis, Aritz rompe su equilibrada psicología para precipitarse y coser fallos inexplicables. Cuando se alarga el tanto, Begino se lamenta.
"Si Patxi Ruiz sujeta bien a Aritz, tiene medio recorrido hecho", sentencia Roberto García Ariño. Destaca por su pericia el de Lizarra, que deberá aplacar sus aires reivindicativos para afrontar un duelo complicado. El manista de Auza será un complicado escollo que ha evolucionado mucho y ya ha dejado atrás los rescoldos de sus dolencias en la cintura. De esta manera, se presenta un choque de trenes. Zagueros de diferente carrocería que deberán hacer terapia para controlar su ansiedad en el Labrit, hoy a partir de las 18.00 horas.
