Casi dos décadas después de su desintegración, el poderoso vocalista Mike Farris tiró de agenda para reunir de nuevo a su banda, The Screamin’ Cheetah Wheelies, estandartes del rock sureño y r&b de finales del siglo pasado. El ciclo Music Legends que acoge la Sala BBK nos permitirá disfrutar mañana de su resurrección sobre los escenarios, desde las 20.00 horas y con entradas a la venta a 25 euros.

Nadie se lo esperaba, ni siquiera los lugartenientes de Farris, quien en este siglo se ha asentado en solitario como un vocalista de garganta fogosa y querencia gospel en discos como Salvations in Lights y el premiado con un Grammy Shine For All The People, cuando el estadounidense decidió juntar a la formación original de The Screamin’ Cheetah Wheelies el año pasado para unos conciertos puntuales en su Nashville natal y en Nueva York.

“La abrumadora respuesta a aquellos conciertos fue totalmente estimulante. Haber estado ausentes durante tanto tiempo y experimentar ese nivel de fervor es el testamento del poder de la música, y no podíamos estar más excitados”, según Farris, quien, junto a Rick White (guitarra), Bob Watkins (guitarra), Steve Burgess (bajo) y Terry Thomas (batería) decidió seguir adelante.

Y ahora, 19 años después de su disolución, Bizkaia tiene la posibilidad de volver a escuchar a uno de los grupos punteros del rock sureño, de herencia r&b, de finales del siglo XX, una banda que debutó en 1994, que dejó discos clásicos como Magnolia o Big Wheel, giró junto a mitos del género como Allman Brothers, Lynyrd Skynrd o ZZ Top, y que coló sus temas en filmes taquilleros y series inolvidables como Los Soprano.

Su concierto de mañana en Bilbao permitirá a sus seguidores comprobar el estado de forma de un grupo histórico y volver a disfrutar de clásicos como Shakin’ the Blues, Boogie King o Ride the Tide con sus “oh oh” herederos del Simpathy for the Devil de The Rolling Stones.

Ojete calor

El dúo Ojete Calor. Cedida

Se hacen llamar los reyes del subnopop y llegan mañana al Bilbao Arena de Miribilla, a las 22.00 horas y con las últimas entradas a la venta a 25 euros. Son Ojete Calor, el artefacto musical y sarcástico que se han inventado el humorista Aníbal González y el actor Carlos Areces, para que, travestidos y pintados como puertas, se rían de todo y todos con temas pegadizos, petardos y bailables como Mocatriz, Viejoven, Opino de que, Madrid–Bilbao–Bollo o Tonta gilipó. l