En la mitología griega, el fénix es un ave de larga vida que se regenera de las cenizas de su predecesor. Aseguran que el fénix muere en un espectáculo de llamas y combustión y retoma el vuelo, como si fuese un ser inmortal. No creo que alcance tal cualidad el bar restaurante Kasko de la calle Santa Maria, por mucho que acabe de resucitar de las llamas que lo devoraron el pasado mes de julio. El gerente del local, Natxo López (en la propiedad firma junto a Lorenzo y Leonor...) organizó una fiesta de resurrección amenizada con la banda de txistularis de Portugalete y la tamborrada de la localidad jarrillera, así como la actuación posterior de Aitor DJ Metro, Jorge Gross; el saxofón de Manolenta, y la banda Confluence, un grupo de música americana (blues, country, rock and roll y soul) formado en Bilbao en 2014. Durante toda la velada, los presentes también se pudieron degustar pintxos variados (de uno de bacalao hablaban maravillas...) y vinos y cervezas. Un disfrute.
En el renacido local, que mantiene el diseño de Emilio Puertas, el arquitecto que dirigió la reforma del Mercado de La Ribera y que ha salvado la moyo Guzzi que tantos pretendientes tiene (Xabier Balledor, antiguo fotógrafo de DEIA daría un nosequé por hacerse con ella...) y las cuatro lámparas de Dora Salazar, con forma de pez, que eran piezas muy representativas de aquella época suya, hechas con ruedas de bicicleta y latas de conserva, toda una artista del reciclaje (si desean saber algo más de ella no se olviden que Dora es autora también, por ejemplo, del grupo escultórico Las sirgueras del paseo de Uribitarte de Bilbao...) se reagruparon los viejos amigos. Natxo se inmortalizó con su plantilla (“ponga usted”, pidió, “que no se ha marchado nadie pese al incendio. ¡Han esperado todos!”) mientras el personal iba llegando.
Allí se dieron cita la teniente alcalde de Bilbao, Amaia Arregi; el director gerente del Palacio Euskalduna, Iñigo Iturrate, Sabier Legarreta; el diseñador Peio Durán; la dama del teatro, Nati Ortiz de Zarate, Jujo Ortiz; el presidente de la Asociación de Comerciantes del Casco Viejo, Luis Arbiol, Janire Torvisco, Susana Alaguero, Alejandro López, hijo de Natxo, Nerea Sáenz, Kristina Vázquez, Ilina Kujleva, Aldana Czyzewska, Álvaro López, Estibaliz Sardón, David Fuentes, patrón del Gofo Norte, Ane Azua, Arturo Trueba, José Antonio Sojo, Mazosky, Ibai Eizaguirre, Xabier Lapitz, Nagore Marcos, compañera de DEIA, Jujo Ortiz, Joseba Rosales, Andoni Marañón, Karla Alonso, Nerea Apraiz, Izaskun Bengoetxea, Ainhoa Mendizabal, Naiara Ortega, Miren Olaizola, Kepa Iriondo, Ander Elorriaga, Iker González, Goio Arbizu, Gorka Amorrortu y un buen número de hombres y mujeres que se acercaron para presenciar el prodigio de cómo un local levanta la persiana y echa a volar cuando hace unos días era aún casi ceniza. Lo disfrutaron de lo lindo y ya saben que late con fuerza uno de sus rincones.
