LA kultur etxea de Sondika será esta tarde (19.00 horas), por unos minutos, el aula de las emociones y las felicitaciones, de los encuentros y las presentaciones, de los buenos deseos y las ovaciones. Los XVI DEIA Laboral Kutxa Hemendik Sariak hacen escala en Txorierri para reconocer y homenajear la predisposición, el carácter, la valentía y la mentalidad de personas que forjan la identidad de este valle.

Un papel extraordinario en la comarca tuvieron Arantza Ibarrondo, Lidia Díez y Kontxi Begoña. Ellas fueron las andereños que participaron en el primer proyecto de enseñanza de euskera en Sondika. ¡Gracias, gracias y gracias! Más nombres de mujer en mayúsculas: Begoña Lopategi, toda una vida en el latido comercial de Zamudio. Primero puso en marcha junto a su marido una pescadería y una charcutería, para después abrir otra pescadería y luego también ponerse al frente del restaurante Aramendi. Y, precisamente, buenos fogones se cuecen en Txorierri: el restaurante Gozkoetxe, en Loiu, es un ejemplo clarísimo. La familia Sampedro tomó las riendas del establecimiento en plena pandemia y hoy es un sitio de referencia.

La comarca puede presumir de enormes cualidades y una de ellas tiene que ver con lo deportivo. Hasta tal punto de que la meca del fútbol base vizcaino está en Lezama. La cantera del Athletic se mima en los terrenos de un municipio en idilio con este club. Allí, además, entrena el primer equipo y eso ha provocado que incontables personas conozcan mucho más y mejor esta localidad. Este deporte lo practican con mucho amor al arte los chicos de Tartanga Fútbol Club, el equipo de aficionados de Erandio que disfruta cada fin de semana pegándole al balón. Otros lo hacen practicando taekwondo, tai chi o jeert kune Do en el gimnasio Doyan, ubicado en Derio. Tantos como 250 personas. Y claro, si hay que remontarse a los 40 años de trayectoria, ya se pierde la cuenta...

Lo de Koldo Zubimendi es de otras dimensiones. Es un alpinista de Erandio de pasión inquieta y de desafíos muy valiosos. El pasado mes de julio consiguió abrir una vía virgen en solitario en el Kharut II, un pico de 6.800 metros del Karakórum, cerca del K2.