Por primera vez en muchísimos años, ayer martesse podía ver la calle Sor Natividad Homedes desde la calle José Miguel de Barandiarán a la altura de los números 24 y 26 de este céntrico vial. La razón no era otra que el avance del derribo de las viviendas de los portales 24 y 26 de Barandiarán, unos trabajos que ya han entrado en su fase final. Tras haber ido derribando, pared a pared y a mano los viviendas ubicadas en el cuarto y el tercer piso, las labores se agilizaron ayer martes cuando ya se pudo utilizar maquinaria de mayor precisión. Así, a primera hora de la tarde el número 26 de José Miguel de Barandiarán, unas casas cuya fachada amarilla llamaba la atención en este lugar, ya era tan solo un cúmulo de escombros que una excavadora apilaba.

Del portal número 24, cuya fachada era morada, ya solo se podía ver parte de las dos primeras alturas y se espera que en las próximas horas también desaparezca del paisaje de este punto de la localidad marinera ubicado junto al ambulatorio central y el instituto Kantauri. Todo ello, se convertirá en un solar en el que próximamente se alzarán 36 viviendas en una actuación que no solo tendrá un profundo carácter urbanístico, sino que también, se espera, que suponga una mejora social en este entorno en el que en los últimos tiempos había habido diversos problemas de convivencia.