Acaban de cumplirse seis años del desbordamiento del Kadagua del 30 de enero de 2015 en Zalla, que en su momento se calificó como el más relevante desde la catástrofe de 1983. Aquella noche se produjeron imágenes que al menos los más jóvenes, no recordaban. “Impactaba ver zódiacs navegando por la zona de la gasolinera”, rememoró Unai Antizar. Aranguren resultó especialmente afectado. Allí, el agua casi salía hasta la vía del tren “y doce viviendas quedaron destrozadas”.
Los vecinos contemplaron asustados cómo “en cuestión de casi dos horas todo se complicó, convirtiendo la calle en otro río”, comentaban Miguel Berlanga y Ángel Franco, otros de los testigos directos. “Esperemos que así no se repitan las inundaciones” en este núcleo urbano, deseaban ayer tras conocer que URA ha licitado la redacción del proyecto de defensa contra crecidas, como continuación a las actuaciones finalizadas el año pasado en el centro del municipio.
Con un presupuesto de 129.040 euros más IVA, se calcula que las obras se prolongarán durante ocho meses. La intervención consistirá, entre otras actuaciones, en la realización de cortas, demolición de azud y modificación del cauce. De esta manera, la Agencia Vasca del Agua lograría reducir las afecciones provocadas por las posibles inundaciones, así como las probabilidades de que se puedan dar este tipo de sucesos. Se efectuará un estudio hidráulico previo que permita ampliar la sección de flujo, evitar el estrechamiento actual, crear cauces complementarios y rebajar el dique existente en la actualidad.
Los avances suponen “una gran noticia para Aranguren”, en palabras del alcalde, Juanra Urkijo. La redacción del proyecto “implica un paso muy importante que nos acerca al ansiado comienzo de las obras de encauzamiento del río Kadagua a su paso por este entorno, lo que supondrá que muchas personas de nuestro pueblo dejen de vivir en un área inundable o reduzcan el riego de inundabilidad y que, sin duda, mejorará su calidad de vida”.
“Para este equipo de gobierno llevar a cabo y a buen puerto este proyecto, junto con la supresión de los pasos a nivel del tren, ha sido y es una cuestión prioritaria”, reitera. Con ese objetivo “llevamos trabajando desde el comienzo de la legislatura codo con codo con URA, con el Gobierno vasco, con Adif y con el grupo vasco en el Congreso de los Diputados, y lo seguiremos haciendo”, subrayó.
Las obras de inundabilidad y el itinerario ferroviario están estrechamente unidos. Mediante el acuerdo logrado por el PNV en Madrid en la negociación de los presupuestos generales del Estado facilitará la eliminación de un kilómetro de vía y seis pasos a nivel entre el centro de Aranguren y la Casa Pinta, a la altura del centro comercial Eroski con un presupuesto de seis millones de euros a desembolsar en dos años. El trazado se trasladaría a la línea Bilbao-Santander. Asimismo, se agilizará la retirada de un puente de la vía y la ampliación de otro que se contemplan dentro de las intervenciones hidráulicas.
Los vecinos piden “que se avance cuanto antes porque tenemos miedo que tal y como ha quedado el centro de Zalla si hay inundaciones el caudal de agua nos venga a Aranguren con más fuerza”.
